La decisión de la alcaldesa, Amparo Marco, de apostar por Juan Ángel Lafuente para ocupar la plaza de director de la Oficina de Planificación y Proyección Económica en el Ayuntamiento de Castelló ha creado cierto malestar entre los socios de gobierno del PSPV-PSOE. Tanto Compromís, integrante del bipartito, como Castelló en Moviment, firmante del «Pacte del Grau», han criticado el proceso de selección e incluso han considerado una afrenta el hecho de haber conocido el nombramiento a través de los medios de comunicación.

«Nos hubiera gustado saberlo antes. Como miembro del gobierno, habríamos preferido no enterarnos de rebote. Es un cargo demasiado importante para que se haya decidido unilateralmente por una persona», ha advertido el portavoz de la formación nacionalista, Ignasi Garcia, en referencia a Marco. «No nos gusta cómo se ha hecho esto. Compromís tenía que haber participado en la elección», ha añadido.

En la misma línea, el representante de CSeM, Xavi del Señor, ha expresado su contrariedad, «porque no es de recibo que una decisión trascienda sin tener en cuenta al socio de gobierno, ni tampoco al firmante del 'Pacte del Grau'». Ante esta situación, «hemos pedido explicaciones al PSOE. Queremos conocer qué criterios se han seguido para la designación», ha avanzado Del Señor. «Nosotros somos muy críticos con estas decisiones, que recuerdan a formas de gobernar de otros, con las que no nos identificamos», ha precisado, en alusión al anterior equipo de gobierno del PP.

Para los socialistas, el proceso se ha realizado con total transparencia. Así, Rafa Simó, portavoz del grupo municipal, ha recordado que «se trata de una comisión de servicios, no de un asesor o de un nombramiento de libre designación. Hace tiempo que teníamos en mente la plaza para coordinar proyectos europeos. Necesitábamos a alguien con peso y de confianza. Por eso se ha elegido a esta persona». En cualquier caso, ha reconocido que «la comunicación siempre se puede mejorar».

El puesto de técnico de Planificación y Proyección Económica, del subgrupo A1, se creó por el equipo de gobierno en los presupuestos de 2016 para gestionar y captar fondos europeos, así como para la puesta en marcha de una cátedra con la UJI. El periodo del contrato alcanza los dos años con una remuneración bruto anual, incluyendo el complemento específico, de 68.700 euros. Esto es, casi 16.000 euros más que la retribución de la propia alcaldesa (52.867,36 euros) y 27.000 euros por encima del salario anual de un concejal con dedicación exclusiva (41.463,96 euros).

Compañeros de departamento

Precisamente esta última cantidad era lo que cobraba Carmen Oliver hasta su dimisión como munícipe el 19 de enero de 2016. Su renuncia por motivos personales impulsaba a Lafuente como nuevo edil al ser el siguiente en la lista del PSPV-PSOE (número 8). Sin embargo, declinó el ofrecimiento, beneficiando con ello a Carmen Ribera (9), que finalmente aceptó entrar en la política activa municipal.

El nuevo cargo de confianza de Marco es profesor titulado en la Universitat Jaume I desde 2002. Licenciado y doctor en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense de Madrid, coincide desde hace años con la alcaldesa, también titulada de la UJI, en el departamento de Finanzas y Contabilidad.

Actualmente, Lafuente no ocupa ningún cargo en la ejecutiva local, ni tampoco en la provincial del PSPV en Castelló. No obstante, en el pasado, concretamente en 2008, integró el equipo de trabajo del secretario general, Francesc Colomer. En esa directiva Amparo Marco era la responsable del área de Economía.