El bosque de pinos en el parque Litoral de Castelló corre peligro de desaparecer en los próximos meses. La repentina muerte de centenares de ejemplares ha puesto en alerta al Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas (Coitavc), que vaticina la pérdida de uno de los pulmones verdes de la ciudad si el ayuntamiento no actúa con carácter de urgencia.
La preocupante situación del espacio natural se refleja en el grave estado de las dos especies de coníferas que se plantaron entre 2007 y 2014, tanto en la inauguración como en una posterior repoblación. El deterioro se da tanto en el pino carrasco (Pinus halepensis) como en el pino piñonero (Pinus pinea), aunque la mortandad en este último prácticamente alcanza el 100%.
Según el portavoz de Coitavc, Jesús Albuixech, urge la rápida respuesta del consistorio para evitar una catástrofe medioambiental. Así, apunta a la necesidad de «realizar un análisis profundo» para posteriormente determinar «un tratamiento fungicida o acaricida», además de otras medidas complementarias. «Es necesario averiguar bien la plaga para acertar con el método», subraya.
Combinación de factores
Los expertos no achacan a única causa la muerte de las coníferas, sino más bien a una combinación de diferentes factores negativos. Entre ellos, «la sequedad ambiental, con una excesiva salinidad, un riego insuficiente y la presencia de perforadores», matiza Albuixech, quien no descarta un brote de Tomicus destruens, coleóptero que en 2014 arrasó el entorno de la ermita de La Magdalena.
El parque Litoral en la playa del Pinar, de especial valor ecológico para la provincia de Castelló, se estrenó el 1 de agosto de 2007. La inversión ascendió a 12,8 millones de euros, lo que permitió aumentar la protección del paraje hasta los 182.940 metros cuadrados. De estos, 80.000 corresponden a ecosistema dunar, donde nidifica el Chorlitejo Patinegro (protegido y símbolo de la biodiversidad); y el resto, más de 100.000 metros cuadrados, a superficie de pradera, en la que se asentaron alrededor de 1.000 arbustos y árboles, incluyendo palmeras.
Pino piñonero
Como conífera se apostó por el pino piñonero, con aproximadamente 100 unidades, elección que Albuixech cuestiona, ya que «no es autóctono, como sí ocurre con el carrasco».
Quizás por ello, el 1 de febrero de 2014 el ayuntamiento realizó una segunda plantación de Pináceas, eligiendo en esta ocasión la especie citada con anterioridad. En total, se abrieron 200 hoyos para otros tantos plantones. Estos ejemplares jóvenes son los primeros que han sufrido las adversas condiciones en el parque Litoral junto a la playa.
De hecho, para el portavoz de Coitavc, «va a ser muy complicado recuperarlos por su alarmante estado». No obstante, insiste en que todavía se está a tiempo de salvar aquellos ejemplares que están mostrando mayor resistencia. «Las copas orientadas al norte se mantienen todavía verdes en algunos pinos. Eso demuestra que el árbol está luchando, pero hay que actuar cuanto antes», aclara Albuixech.
En este sentido, recuerda que el debilitamiento general representa una invitación a nuevas plagas.
