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El PP de Castelló batallará en el congreso regional por su representatividad

El partido considera que la regeneración tras los casos de corrupción y el aval de las urnas debe reconocerse a nivel de la Comunitat Valenciana

El PP de Castelló batallará en el congreso regional por su representatividad

El Partido Popular de la provincia de Castelló considera que los resultados obtenidos en el XVIII congreso nacional de este pasado fin de semana pueden calificarse como positivos, no por la representación orgánica obtenida sino porque no se ha perdido ninguna batalla.

La cúpula del partido se da por satisfecha con la influencia que asegura tener en Génova y, concretamente, en el presidente del gobierno Mariano Rajoy.

Más allá de la inclusión de Vicent Sales como vocal en la junta directiva nacional, se destaca que su nombre aparezca en el listado de la candidatura de Rajoy a la presidencia del partido, más que la repercusión de esa nominación para un órgano compuesto por casi 500 delegados.

Del cónclave de este fin de semana en Madrid, desde Castelló se quiso destacar la cantidad de enmiendas presentadas y debatidas (las enmiendas aceptadas no se votaban) y la libertad con la que se ha podido votar, incluso en posicionamientos contrarios, por encima de la representación. No obstante, la batalla se va a presentar a nivel autonómico.

La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, quiso que el congreso valenciano fuera el primero a celebrarse tras el nacional, pero las fechas, con las fiestas de Fallas y la Magdalena en medio, condicionaron que se retrasara hasta el 1 y 2 de abril.

Ayer se se reunió la junta directiva regional y se nombró el comité organizador del congreso regional, solo un día después de la cita en Madrid, en un intento de destacar la importancia que se le quiere dar a la cita valenciana.

En este sentido, los castellonenses interpretaron como un refuerzo que la diputada provincial Elena Ruiz-Vicente fuera escogida para la vicesecretaria de organización del congreso autonómico.

Este cónclave valenciano presenta muchos interrogantes que deberá despejar la militancia -desde este fin de semana el partido ha cambiado la denominación a 'afiliados'- debido a que será un congreso en el que se pondrá en marcha la nueva normativa que regula la elección del presidente del partido. No son primarias entendidas tal y como la nomenclatura de otras organizaciones las describe, sino que los afiliados al corriente de pago deberán inscribirse en el congreso y automáticamente pasarán a ser compromisarios, con lo que podrán votar las enmiendas y las candidaturas.

Este hecho, el del voto por los afiliados, propuesto y defendido por Castelló y por Isabel Bonig, deriva en que la proporcionalidad en población y en militancia de la provincia la relegue respecto a Valencia y Alacant. Un aspecto a tener en cuenta para la reelección de Bonig ya que si bien cuenta con uniformidad en Castelló, depende en exceso de Alicante y Valencia para contrapesar a Vicente Betoret, el otro candidato.

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