La popular zona de las tascas de Castelló encara un nuevo episodio en el litigio judicial que dirime desde hace casi una década con la asociación de Castelló Sense Soroll. El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha prohibido la venta de alcohol en el exterior en las calles de Barracas e Isaac Peral a partir de las diez de la noche. La resolución es firme y supone una hora menos respecto al horario actual, ya que la declaración de Zona Acústicamente Saturada marca el cierre de las tascas a las 23. Los magistrados consideran insuficientes los veladores (mesas en alto) que habilitaron los locales en la calle, pero salva a las terrazas de la plaza Santa Clara. De esta forma, los clientes de las tascas podrán seguir consumiendo de 22 a 23 en el interior de los establecimientosde Barracas e Isaac Peral o en las terrazas de Santa Clara.

La decisión del TSJ confirma una sentencia de la misma instancia de 2015 que anulaba la ingesta de alcohol en el exterior de las citadas calles por contravenir la ley autonómica de Drogodependencia. Sense Soroll presentó luego un recurso solicitando la ejecución del fallo, mientras el ayuntamiento alegó que los locales de Barracas e Isaac Peral cumplían el mandato judicial con la instalación de veladores.

El TSJ reitera que de la prohibición de beber en la calle a partir de las 22 quedan exoneradas las terrazas, pero entiende que el consumo en Barracas e Isaac Peral se realiza en la calle y no sólo en los entornos de los veladores.

El ayuntamiento asume la sentencia y admite que los bares de Barracas e Isaac Peral sólo podrán suministrar en el interior a partir de las 22 horas. Desde el gobierno local lamentaron «la situación heredada que se arrastra con las tascas, porque el Partido Popular no supo gestionar este tema en su momento», y recordaron que el ejecutivo local «ha mantenido una postura de diálogo con todas las partes implicadas para intentar llegar a un consenso sobre este tema».

Las mismas fuentes insistieron en que «esta resolución se refiere, exclusivamente, a la venta de alcohol para su consumo en la calle, quedando excluidos, los locales, terrazas y los espacios expresamente autorizados».

«Ello no significa, en ningún caso, que los locales deban cerrar a las 22 horas. Dentro de su establecimiento, en sus terrazas, podrán desarrollar su actividad y vender alcohol hasta el horario autorizado, dependiendo de sus licencias», añadieron.

Clausura de un local

Las tascas cuentan desde 2011 con la medida de Zona Acústicamente Saturada, una figura legal que limita su apertura hasta las 23 horas y que impide la concesión de nuevas licencias.

Recientemente clausuró un local de la calle Isaac Peral por denegarse una nueva licencia por la ZAS. Desde el ayuntamiento subrayaron que esta norma continuará vigente por tiempo indefinido al continuar la contaminación acústica en esta zona. Contempla una rebaja de dos horas en el cierre de los establecimientos respecto al horario habitual del resto de bares de la ciudad.

Segundo proceso judicial

El Tribunal Supremo tiene pendiente resolver un segundo proceso judicial que inició también Castelló Sense Soroll contra el modelo singular de las tascas. El Supremo validó en 2014 la ordenanza que regula la venta de alcohol en sus calles, pero Sense Soroll presentó otro procedimiento sosteniendo que incumplía la ZAS. El TSJ atendió en 2015 el recurso de Sense Soroll y el ayuntamiento alegó al Supremo.