El Almazora, tras caer derrotado por 2-1 en el campo del Novelda en la jornada del miércoles, acumula diez partidos sin conseguir la victoria (ocho derrotas y dos empates). El equipo blanquinegro hace veinte años que no estaba tanto tiempo sin ganar y hay que remontarse a la temporada 1996-97 en la que los almassorenses firmaron una de sus peores campañas. Fue cuando militaban en Regional Preferente y los futbolistas almassorenses solo fueron capaces de ganar un partido, por tres empates y 34 derrotas más. En total marcaron 28 goles y encajaron 141.

En estos momentos la situación no es tan desastrosa, pero empieza a ser preocupante porque el amplio colchón de puntos que tenía el equipo de Iván Medall hace unos meses se ha visto reducido a cinco sobre los puestos de descenso y el calendario es complicado en las dos próximas jornadas, con encuentros ante Ontinyent y Castellón.

Habrá que esperar a ver si el plantel es capaz de dar la vuelta a la situación en estas dos próximas jornadas ya que el Almazora no gana desde el 17 de diciembre pasado cuando superó al colista Segorbe (4-1) en el José Manuel Pesudo.

Desde entonces solo ha sido capaz de sumar dos de los treinta puntos en juego debido a las ocho derrotas y dos empates encajadas desde entonces. En este sentido, urge una victoria para romper la mala y a la vez preocupante dinámica del equipo y para que los jugadores recuperen la confianza y su mejor versión en el tramo final de la temporada en Tercera División.