La Generalitat desbloquea la obra del nuevo colector en la Primea Travessera de la Marjaleria una obra que la zona demanda desde hace tiempo para evitar las inundaciones en cada episodio de lluvias que se produce en la ciudad. Así, el pleno del Consell aprobó ayer un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Castelló para evitar el desbordamiento de acequias en la Marjaleria.

El acuerdo tiene como objeto realizar durante este año las obras de la actuación de «medidas contra la inundabilidad por desbordamiento de cauces de acequias de obra y ambientales mediante la ejecución de conducción de aguas residuales a la red de la EDAR de Castelló ámbito de la Primera Travessera Plan Especial de la Marjaleria», informaron ayer fuentes de Presidencia de la Generalitat.

El importe total de las obras es de 709.439 euros, de los cuales, hasta 400.000 serán aportados por la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.

A fin de lograr los objetivos del Plan especial de la Marjaleria resulta necesario la construcción de una serie de infraestructuras que requieren aunar esfuerzos por las distintas Administraciones Públicas, informaron las mismas fuentes, que indicaron con el objeto de seguir trabajando conjuntamente, el Consell ha autorizado la suscripción de un nuevo convenio de colaboración que regule los términos en los cuales se realizará la financiación de las obras en la Marjaleria.

El presente acuerdo, que mantendrá su vigencia hasta el 31 de diciembre de 2017, pretende evitar el desbordamiento de las acequias y la consecuente inundación en la zona de la Marjaleria. Para ello se conducirán las aguas residuales a la red de las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) de Castellón. El proyecto de obras tiene como objeto dotar a la ciudad de las infraestructuras necesarias para permitir dicha conducción para evitar inundaciones.

La ejecución de esta infraestructura estaba prevista inicialmente para el año pasado, pero la Conselleria de Agricultura alegó entonces que los recortes del Gobierno central habían obligado a posponerla a 2017.

En 2015, el Consell y el ayuntamiento impulsaron una primera fase del proyecto antiinundación de la Primera Travessera, que consistió en la construcción de una red de saneamiento en el camino la Mota y la estación de bombeo y canalizaciones hasta la nueva red.

Revisión del PGOU

Estas sobras coincidirán en el tiempo con la revisión del Plan General de Ordenación Urbana, con la que el gobierno municipal aspira a solventar los problemas legales que sufre la zona. En su primera borrador plantea la legalización de las casas que se encuentran en situación alegal en la actualidad excepto las que se encuentren inmersas en procesos judiciales, al tiempo que paraliza la construcción de nuevas edificaciones. En estos momentos, la falta de ordenación impide que las casas ya construidas impulsen reformas de mantenimiento aunque estén en suelo urbanizable.