La diputación garantizará la instalación de más de 180 desfibriladores en la provincia para convertir Castelló en el primer territorio cardioprotegido de todo el panorama nacional «y que los castellonenses, sin importancia de su lugar de residencia, cuenten con este servicio sanitario a su alcance». De esta forma será pionera en la Comunitat Valenciana y prácticamente a nivel nacional en garantizar este sistema de actuación ante emergencias de riesgo vital.

La diputada de Acción Social, Elena Vicente-Ruiz, adelantó ayer que el ambicioso programa de prevención cardiovascular «está cerca de ser una realidad que permitirá salvar vidas en toda la provincia». Para ello, el proyecto se encuentra en fase de adjudicación previo a la apertura de las bases pero desde la administración provincial se asegurará al menos un desfibrilador (dispositivo DESA) en cada municipio solicitante gracias a una inversión superior a los 272.000 euros.

«La salud y el bienestar de los castellonenses es la máxima prioridad de esta administración. Desde el Gobierno Provincial garantizaremos un desfibrilador allá donde se haya solicitado, valorando además la realidad del municipio y la necesidad que éste pueda tener en cuanto a la instalación de más dispositivos», explicó Vicente-Ruiz.

No en vano, la diputada de Acción Social advirtió los desfibriladores se instalarán por toda la provincia previa formación.