Castelló afrontó ayer uno de los días con más simbolismo y emotividad de sus fiestas fundacionales con la Ofrena a la Verge de Lledó. Más de 5.000 personas desfilaron con atuendos típicos de castellonera/o y formaron ante la basílica de la patrona de la ciudad un manto de flores rojas, rosas,amarillas y blancas. La marcha de las reinas, Estefanía Climent, y Berta Montañés, acompañadas de sus cortes de honor, culminaron un acto con el que la ciudad rindió tributo a la «Lledonera».

La Ofrena se desarrolló por segundo año consecutivo de forma partida. Participaron más de un centenar de entidades, asociaciones de diversos ámbitos, collas, entes vinculados y gaiatas de Castelló, cada una con su respectiva enseña. El aire gélido de la jornada no desincentivó la participación ni restó un ápice de solemnidad a la Ofrena.

Por la mañana, la Ofrena empezó puntual, a las diez y media, y partieron hacia la Basílica de Lledó asociaciones de padres y madres de 25 centros educativos de la ciudad, escuelas de danza de la ciudad, 37 collas, 10 casas regionales y las cuatro cofradías de Semana Santa. También homenajearon a la Verge de Lledó una multitud de castellonenses que lo hicieron a título particular.

Por la tarde fue el turno de las asociaciones de Festes de Carrer, los entes vinculados de las fiestas como las collas Bacalao, Rei Barbut, Cavallers Templers, la Host de Castell Vell y la Germandat dels Cavallers de la Conquesta y las 19 comisiones gaiateras. A continuación siguieron reinas de diferentes municipios de la provincia, reginas mayor e infantil de Castelló de años anteriores, las cortes mayor e infantil de 2016 y las delegaciones de Borriana, Alicante y Valencia.

En la parte final se produjo el momento culminante con el cortejo de la Junta de Festes, las reinas y sus damas de honor, que remataron con flores de color blanco el tapiz de la Verge de Lledó. La reina, Estefanía Climent realizó el recorrido junto a la concejala y presidenta del Patronat de Festes, Sara Usó.