Bajo el lema «Benicarló, city of swifts», o lo que es lo mismo, Benicarló, ciudad de los vencejos, Ecologistas en Acción y el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Benicarló han consolidado la apuesta por la lucha biológica contra los mosquitos consolidando la apuesta que el año anterior ya se llevó a cabo en la plaza de Els Telers de la localidad.
Ahora, la incorporación de 10 nuevos nidales que se suman a los anteriores puede reforzar la presencia de estas aves que con su presencia controlan las plagas de mosquitos. Una plaza, la de Els Telers, que había sido históricamente centro de una gran colonia de vencejos pero que había visto desaparecer de su paisaje a estas beneficiosas aves a causa de una reforma arquitectónica que había taponado todas las entradas a sus nidos. Unas «casas» que los vencejos formaban en los agujeros que la propia obra dejaba al descubierto y que al ser taponados impidieron que regresaran cada año a sus hogares.
El vencejo es un ave que regresa siempre al lugar donde anidó en anteriores ocasiones, como explicaban el portavoz de APNAL-Ecologistas en Acción, Quique Luque. «La plaza Telers hace 15 años contaba con una población flotante de vencejos de 40 parejas, por lo que queda mucho trabajo por hacer, ampliamos ahora la colonia con 24 zonas de nidificación, y aún se puede sacar un mayor rendimiento, potenciando, conservándola y para que haga su función. Los vencejos comen por cada individuo 55 kg. por año». «Su función es brutal y muy beneficiosa». Esta acción se podría extrapolar a otras zonas de la localidad, como la calle Cristo del Mar, la zona de la iglesia parroquial, entre otras, como indicaba Luque. Aun así, existen puntos de muestreo en calles como cesar Cataldo, calle Rey Jaume I, o calle santa Cándida, «han sido esporádicos para comprobar si la especie se adapta a estas zonas, son lugares nuevos y es difícil que en un año los vencejos encuentren estos nuevos lugares. Los vencejos ocupan cada dos años sus zonas de nidificación». Los vencejos, a consecuencia del cambio climático, han avanzado su llegada, y ya se ha detectado su presencia en diferentes puntos de la Comunitat. Se trata de especies protegidas.
Segunda instalación
Con la colocación de nuevos nidales, que tienen un costo tanto en horas como en material, ya que pueden llegar a costar 150 euros, el edil de Medio Ambiente, Ximo Bueno, mostraba su satisfacción por esta apuesta en coordinación con el grupo ecologista, que viene a sentar las bases de una voluntad conjunta. «Por segundo año consecutivo, se trata de seguir con la labor de instalar nidos para los vencejos con esta segunda instalación, junto con las 18 cajas instaladas en el CEIP Francesc Català, la idea es que los vencejos regresen al lugar donde nacieron y se criaron. Desde el ayuntamiento en colaboración con APNAL queremos incrementar el número de cajas». «Es un agente natural para el control de los insectos, especialmente de los mosquitos», añadió.
