La empresa que gestiona la autopista A-7 deberá abonar un recibo complementario en concepto de IBI después de detectarse que en la recaudación correspondiente al año 2016 el servicio que gestiona la Diputación Provincial de Castelló cobró un porcentaje inferior establecido, lo que suponía una merma en los ingresos municipales que rondaba los 60.000 euros.

Así lo denunció el grupo municipal de Compromís que en una revisión de la base de datos encontró «errores en el tipo impositivo que se debe aplicar a los bienes urbanos de naturaleza especial, más concretamente en los recibos que se giraron a Autopistas Aumar», según denunció Joan Vilar.

Compromís puso de manifiesto esta irregularidad de la que el equipo de gobierno tuvo conocimiento el pasado lunes, según confirmó el alcalde, Wenceslao Alós, que ayer confirmó que «de inmediato nos pusimos en contacto con la Diputación informándoles sobre este error, que se subsanará girando una complementaria con la diferencia que la empresa deberá abonar».

Parece ser que esta no es la primera vez que se produce un error de estas características. Alós explicó ayer que «en la legislatura anterior ya se tuvieron que tramitar complementarias por varios años en los que se estaba cobrando mal».