Luis Aragonés refirió en su regreso al Atlético de Madrid en Segunda División que los objetivos al final de temporada los consiguen los equipos que llegan a abril y mayo con el momentico. El sabio de Hortaleza se refería a ese estado óptimo de forma que alinea los astros en el camino correcto y que permite concluir con éxito las temporadas.
En clave amarilla, ese punto óptimo le permitió superar al F.C.Barcelona en la temporada 2007-08 y conseguir adelantarle en la clasificación para terminar en segunda posición. Lo consiguió, por ejemplo, Osasuna el año pasado para colarse en Primera División. De ejemplos está plagada la hemeroteca.
Sin embargo, el momentico tiene su lado oscuro. No son pocos los casos de equipos a los que se les ha hecho larga la temporada y se han caído de posiciones de privilegio ocupadas como plazas fuertes durante gran parte de la campaña. El rival del Villarreal del pasado domingo puede dar fe de ello pues, de hecho, le costó un descenso el año de su debut en la elite.
Así mismo, el Villarreal vivió hace dos temporadas una situación similar tras ser apeado en las semifinales de la Liga Europa por el Liverpool y ver acosada su posición europea por el Málaga.
Esta triple jornada intersemanal inaugura abril, el mes clave de la competición, y el equipo de Fran Escribá observa cómo la propia indefinición puede apoderarse de manera negativa de los jugadores ante una lucha por las plazas europeas que se antoja estrecha y disputada.
El Villarreal afronta el partido de esta noche ante el Betis como una visita al granero antes de la llegada del lobo. Este domingo llega al estadio de La Cerámica el Athletic Club que si bien empieza la jornada a un punto del equipo amarillo, da muestras de encarar con fuerza el tramo final. Sobretodo por el buen momento de Aduriz y Williams. En situación parecida, pero con menos recursos, se encuentran Espanyol y Eibar, que bien pueden luchar por esa séptima plaza que lleva premio europeo si el Alavés no gana la Copa del Rey.
Por eso, la visita al Benito Villamarín se antoja determinante para que la plantilla del Villarreal consiga una posición de fuerza que, si bien se recuperó en las últimas jornadas, permanece en duda tras las dos últimas derrotas.
A la cita acude Escribá con las bajas de Asenjo, Cheryshev, y Rukavina, que llegó lesionado de la jornada de selecciones. Cabe esperar que el técnico recupere la dupla de centrales, con Musacchio y Víctor Ruiz, mientras que Jonathan dos Santos podría dar descanso a Castillejo.
Por lo que se refiere al rival, las aguas bajan revueltas en el plano social para el técnico Víctor Sánchez, mientras que, en el deportivo, la duda se centra en Dani Ceballos, que ayer entrenó aparte, y en ver cómo responde el equipo a la derrota ante el Espanyol.