Borriol y Torreblanca vivieron la noche del Jueves Santo dos de los actos principales de la Semana Santa en Castelló. Los dos municipios de la Plana Alta celebraron sus respectivas Pasiones, las más longevas de la provincia. Miles de vecinos y visitantes se acercaron a estas dos localidades para presenciar unas representaciones con el distintivo de Fiesta de interés turístico provincial y en las que se vuelcan los vecinos de ambos municipios. Ambos actos cuentan con el apoyo de sus respectivos consistorios y la Diputación de Castelló.

La Pasión Nueva Jerusalén de Borriol representó un Jueves Santo más, y ya van 42, su recreación de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo. La obra arrancó como es tradición con la Última Cena, en una localización secreta. Seguidamente, las escenas se fueron desarrollando en los lugares más conocidos del casco urbano como las plazas de La Font o Atzavara, ante presencia de un números y silencioso público.

La representación, que contó con más de 200 actores, finalizó como marca la tradición en el Calvario con la escena de la Crucifixión de Jesucristo, cuya subida junto al grupo de tambores fue uno de los momentos más emotivos de la noche. Jesús estuvo representado un año más por Rafael Lloret Porcar.

Estreno de Carlos Casanova

Torreblanca vivió también su multitudinaria «Passió». Todos los focos estuvieron puestos en la figura de Carlos Casanova, que se estrenó en el papel de Jesucristo. Casanova dejó el papel de Herodes, que este año interpretó Eduardo Saura, y tomó el relevo de Abel Segura. La representación arrancó en la calle Sant Antoni con la entrada a Jerusalén. El resto de escenas, como Última Cena o el Sanedrín, tuvieron lugar en la plaza de la Iglesia.

«La Passió» finalizó en el Calvari, en el entorno de la ermita de Sant Francesc, con las escenas de la crucifixión y muerte de Jesucristo. La Passió de Torreblanca, que fue estrenada en el año 1979, tiene como una de sus principales características sus diálogos en valenciano. El presidente de les Corts Valencianes, Enric Morera, y el diputado de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, siguieron la representación.