El Villarreal puede darse por satisfecho con la situación en la que se encuentra tras la trigésimo sexta jornada de Liga. Entraba dentro de los planes sufrir una derrota en el Camp Nou, contra un Barcelona que todavía disputa el título, pero las actuaciones de sus dos máximos adversarios por la quinta plaza han permitido al equipo de Fran Escribá mantener la posición. Además, el submarino depende de sí mismo, en las dos jornadas que restan, para asegurarse la quinta posición

Lo más positivo de la goleada recibida ante los azulgranas es que el Villarreal todavía depende de sí mismo. Si el equipo de la Plana consigue los seis puntos restantes, además de certificar su presencia en la próxima Europa League, se asegurará su presencia en la fase de grupos, y sobre todo sin tener que esperar el resultado de la final de la Copa del Rey para saber si la séptima posición da acceso a competición europea.

Por delante, el submarino tiene dos encuentros, en teoría asequibles, para asegurar su objetivo. El próximo domingo, el Villarreal recibe en casa al Deportivo de la Coruña. Los gallegos, virtualmente salvados, son un escollo superable para el equipo de la Plana. Con el apoyo de la afición, y después de cinco triunfos en las últimas siete jornadas, el conjunto de Escribá debería sumar una victoria necesaria en esta recta final.

Pero, aunque se lograse el triunfo ante el conjunto de Pepe Mel, el Villarreal no podría relajarse ni siquiera en el último partido del campeonato. Si Athletic y Real Sociedad también consiguen la victoria en sus respectivos partidos de la penúltima jornada, el derbi autonómico contra el Valencia también sería vital.

Los che, que ya no se juegan nada desde hace semanas, recibirán a los amarillos en Mestalla en la despedida de la temporada. En la recta final de la campaña, el conjunto de Voro ha mejorado su rendimiento como local, y querrá despedirse de su parroquia con un buen resultado, tras una Liga para el olvido. Pero, con mucho más en juego, el Villarreal debería hacer valer su necesidad para sumar otro triunfo básico para asegurar la quinta plaza.

Los rivales directos

Tanto Athletic como Real Sociedad perdieron una gran ocasión, el pasado fin de semana, para adelantar al Villarreal. Ninguno de los dos fue capaz de ganar, y ahora deben vencer los dos encuentros que les quedan, a la espera de un tropiezo amarillo.

El equipo de Ernesto Valverde que, con todo a su favor, ayer cayó en el derbi regional contra el Alavés, se mide a un conjunto de la zona baja y a un semifinalista de la Champions League. La semana que viene visitará San Mamés el Leganés de Asier Garitano. Los madrileños podrían asegurar su permanencia en Primera División hoy contra el Betis, por lo que el duelo ante los vizcaínos podrían ser un mero trámite.

El cierre de la campaña para el Athletic será en el Vicente Calderón frente al Atlético de Madrid. Un duro escollo para intentar asaltar la quinta plaza.

Por su parte, la Real Sociedad despide la campaña ante dos equipos que ya no se juegan nada. Anoeta recibe el próximo domingo al Málaga de Míchel. La temporada la despedirán los donostiarras en casa del Celta de Vigo. Los de Berizzo, sin opciones europeas, no deberían oponer demasiada resistencia.