El senador por Castelló de Compromís, Jordi Navarrete, defendió en solitario en la comisión de Medio Ambiente del Senado «que el Gobierno ponga en marcha medidas dirigidas a asumir el coste del canon de construcción de las desaladoras de la Plana». As mismo, Navarrete instó a « derogar los convenios suscritos con los ayuntamientos afectados y empezar a trabajar con otro que contemple un nuevo estudio de viabilidad que valore los posibles usos alternativos, aprovechamientos, costes de estas dos desaladoras». Además, abogó por «negociar los acuerdos con las entidades locales según la nueva realidad que se determinó y renegociar con la Unión Europea la inversión hecha de los fondos FEDER, para evitar que la no puesta en funcionamiento hasta ahora suponga sanciones».

El PP presentó una enmienda de sustitución instando al Gobierno a «estudiar la forma de hacer viables técnica y económicamente las desaladoras, que permita su puesta en funcionamiento, haciendo más asequible el consumo de agua desalada y con un coste asumible para los ayuntamientos» y a «estudiar la incorporación de nuevos usuarios a las desaladoras existentes para asegurar la viabilidad de éstas obras».

A este respecto, Navarrete lamentó que la enmienda no fuera de adición a la propuesta que defiende la coalición y numerosos usuarios y representantes de estos municipios «ya que deja a los municipios sin una solución, con una infraestructura que no necesitan para nada, mal planificada, insostenible desde el punto de vista económico».