El Recinte Fester de Almassora acogió ayer a los 386 pequeños participantes en el Día de los Niños, la iniciativa de nueva creación pensada para atender al público infantil, que esta semana de las fiestas de Santa Quitèria tiene vacaciones escolares. La carpa abrió sus puertas a la diversión a partir de las 10.00 horas para los pequeños de hasta 12 años. Los asistentes inscritos recibieron un bocadillo y bebida a su llegada para coger fuerzas y disfrutar con los hinchables, la fiesta de la espuma y los juegos tradicionales.

En este sentido, la concejala de Fiestas, Isladis Falcó, agradeció la colaboración de Lluïsos Almassora para recuperar los antiguos modos de ocio infantil. «La comba, las carreras con chapas, los bolos... todos estos juegos están presentes hoy para niños más acostumbrados a tabletas y ordenadores que a las actividades tradicionales, y solo con ver la cola de la entrada creo que la iniciativa ha sido un éxito», afirmó.

Por su parte, la jornada taurina alcanzó el ecuador de la feria con la doble exhibición vespertina. En este caso, las peñas El Polp, El Bocao, Gamusinos, Pirula, La Jerga, El Deklive, La Trieka y La Kliba apostaron por un ejemplar de La Palmosilla, mientras que la agrupación formada por las peñas San Fermín, T'Empujen, Amigues del Bou, Maracay y El Retiro confíó en un toro de El Soldado. Ambos salieron desde los corrales de la plaza Mayor. En cuanto al aficionado herido el martes, ya se encuentra en planta en el Hospital General.

La reina de las fiestas, Paula Cubertorer, y las damas Alba Caravaca, Irene Delgado, Mónica Moral y Andrea Sánchez también asistieron a la entrada de vacas de la ganadería de Miguel Parejo, de Cabanes, y la posterior prueba por la Vila. El ganado de Parejo resultó vencedor del concurso de la feria del Roser, por lo que la Comissió del Bou de la Junta Local de Fiestas (JLF) volvió a contar con su participación en el ciclo de Santa Quitèria. Precisamente, la JLF patrocinó también el encierro infantil de carretones.