Hasta once asociaciones empresariales de Castelló defienden la continuidad de la Confederación de Empresarios de Castelló. Representan un tercio de las organizaciones la CEC. Otras 14 no han concretado su posición mientras ocho abogan por disolverla y por integrarse en la nueva patronal autonómica que propone Salvador Navarro.
Las asociaciones de la construcción, comercio minorista, servicios terciarios avanzados o agricultores son algunas de las once que defienden la existencia de una patronal provincial autónoma de València, avanzaron fuentes de la CEC. Este grupo está formado sobre todo por las organizaciones que representan las actividades económicas con menos peso en el tejido provincial. En el otro frente se sitúan las tres patronales de la industria cerámica (Ascer, Asebec y Anffecc) y turismo (Ashotur), dos de los sectores que más empleos generan y que lideran la recuperación económica.
A favor de los partidarios de la supervivencia de la CEC está el hecho de que, a falta de que se manifiesten los colectivos que guardan silencio, representan a la mayoría de las 33 asociaciones que están registradas en la CEC. Son una tercera parte y no cabe descartar que se sumen más entidades si este movimiento gana fuerza y si se clarifica el concurso de acreedores en el que se encuentra inmersa la patronal castellonense. Considera que es necesario que continúe una entidad con autonomía de València para defender los intereses de Castelló, especialmente de los sectores económicos más pequeños.
Las dos posiciones debatirán el futuro de la CEC en una junta directiva convocada el próximo lunes. Probablemente, según las mismas fuentes, se celebrará una votación para decidir si la CEC se disuelve y se incorpora en la nueva CEV o continúa como tal e intenta renegociar con la regional de Navarro una entrada en la misma pero respetándose su personalidad jurídica propia.
Los defensores de la CEC mentan que el informe de la administradora concursal apunta que es viable mantener la patronal provincial con una estructura de mínimos.
Si gana esta opción el lunes, la gestora de la CEC encarará una complicada negociación con la CEV, ya que esta última se opone a la existencia de las provinciales actuales. Su sistema supera el viejo esquema para reforzar el peso de los sectores industriales más fuertes como el azulejo, automóvil, la gran distribución o calzado. Tampoco quiere asumir la deuda que arrastra la patronal de Castelló de la época de José Roca y Rafael Montero. Quedaría por resolver en este escenario el camino de las patronales de la cerámica; si estarían dispuestas a compartir la patronal autonómica y de Castelló o se desmarcarían de la provincial si prosiguen las dos estructuras de manera paralela.
