Dos aficionados denunciaron agresiones sufridas durante la embolada del jueves en el barrio Monseñor Fernando Ferrís de Onda que tuvieron su origen, al parecer, en el momento de coger al toro del rabo.

El peor parado fue un aficionado que medió ante la supuesta agresión a un joven de 17 años. El primero recibió una patada en el costado y un puñetazo en la cara, y en segundo, como consecuencia de los golpes, tiene moratones en los brazos.

Los agredidos, según la versión del aficionado de mayor edad, acudieron posteriormente al centro de salud para conseguir el parte de lesiones, y al día siguiente, al cuartel de la Guardia Civil para presentar denuncia. La Policía Local y Autonómica levantó acta, según confirmaron fuentes municipales.