El Real Madrid sigue siendo el Real Madrid: la bestia negra del Villarreal en la Copa del Rey Juvenil. Lo fue y lo sigue siendo, tal y como demostró ayer. Los goles de los palentinos Manu Hernando y de César Gelabert ponen la eliminatoria de esta semifinal de la Copa del Rey muy cuesta arriba para los intereses del equipo de la Plana Baixa que deberán remontar en su feudo para acceder a la final de este torneo. El duelo, en líneas generales, resultó muy igualado. Durante unas fases fue dominado por los madridistas y por otros por la escuadra grogueta. Y cuando los encuentros son tan igualados suele decidir la mejor definición y esa volvió a ser para el conjunto capitalino.

No se había cumplido el cuarto minuto de juego cuando el vigente campeón de la Copa de Campeones se puso con ventaja en el marcador. El gol nació tras un saque de esquina ejecutado por el talaverano Óscar Rodríguez, donde le central palentino Manu Hernández cabeceó desde la frontal del área pequeña y el balón, tras rozar en la cara del gaditano Pepe Castaño, acabó con besando las mallas. Volver a empezar, pero con la semifinal cuesta arriba. Un gol en contra ya.

Y es que se tuvieron que modificar los planes iniciales para intentar igualar el encuentro. El Real Madrid de Guti salió muy fuerte. Desbordó por diestra y siniestra. El segundo gol no llegó en el octavo minuto de juego de milagro. Los amarillos se pusieron el mono de trabajo y tanto Sergio Lozano como Fran Álvarez, junto a Andi Bogdan, la empezaron a tocar. Superado el cuarto de hora el rumano Andi Bogdan cabeceó alto un saque de esquina.

El duelo se equilibró, después del mazazo incial y, por momentos, el Villarreal tuvo más el control, y la posesión del balón. Los madridistas arriesgaron poco y por eso el equipo de Javi Calleja se hartó de tener el balón, pero sin encontrar espacios para entrar cerca de los dominios del alicantino Javi Belman.

Se perdona la igualada

Se llegó al descanso así, con el 1-0, y en la reanudación un cambio del Real Madrid para reforzar el centro del campo. El canario Toni Segura dejó su puesto al holandés Mink Martin. Y con todo ello, el empate lo tuvo en sus botas el pachequero Iván Martín en el minuto 48, pero Belman rechazó con los pies. También pudo llegar el 2-0 en este tramo del encuentro, pero la bonita penetración del jerezano Javi Hernández por la izquierda fue rematado por el pichichi local Dani Gómez, pero Josele interceptó el cuero.

Fue, en líneas generales, un partido jugado de tú a tú entre dos equipos sin miedo a conseguir el triundo. Los dos entrenadores apostaron por los recambios sobre la marcha en busca que más equilibrio, pero el partido estaba tan igualado que el gol podía caer perfectamente en cualquiera de las dos porterías. El Real Madrid veía bueno el 1-0 y el Villarreal era consciente de que le podía echar mano al equipo de Guti.

El 2-0 llegó a falta de diez minutos para el final. Por la izquierda se gustó el argentino Frenchu y al llegar a la línea de fondo asistió raso a la frontal del área pequeña para que el palentino César Gelabert sólo tuviera que empujar al fondo de la red. El propio Gelabert, en el 88, tuvo el 3-0, pero se la paró el arquero murciano Josele Martínez.