El Rali de la Cerámica, que recorrerá mañana y el sábado las carreteras de Castelló, celebra su vigesimoctava edición consolidada como una de las pruebas más importantes del calendario nacional y puntuable para el campeonato regional de rallys de la Comunitat Valenciana. Tal como se informó ayer en el acto de presentación que tuvo lugar en el Ayuntamiento de Castelló, mañana se dedicará a las verificaciones administrativas y técnicas mientras el sábado se celebrará la competición en sí. Con una etapa y cuatro secciones que se recorren dos veces cada una, el rally cubrirá un total de 389,5 kilómetros, 115 de ellos cronometrados, y congregará a más de 40 participantes.
El recorrido es el mismo que el del año pasado y atraviesa tres comarcas: la Plana, l'Alt Millars y l'Alcalatén. Argelita-Llucena, Cedramán-Ludiente, Pantà del Sitjar y Costur-Vilafamés son los tramos contra el reloj. El trazado es muy variado ya que se mezclan tramos con subidas y bajadas rápidas junto a otros más técnicos.
La organización de este tipo de competiciones tiene muy presentes las medidas de seguridad. «Intentamos que cada año sean más estrictas para que se pueda compaginar la diversión de los aficionados con la ausencia de riesgos innecesarios», aseguró el director del rally, que trabaja estrechamente con la Guardia Civil de Tráfico, que destinará una quincena de agentes a la prueba.
Serán algunas de las aproximadamente 300 personas que trabajan para que el acontecimiento sea un éxito, desde comisarios, cronometradores y radioaficionados hasta policías locales, miembros de Protección Civil, bomberos, grúas, ambulancias y personal sanitario.
