La historia del Grau de Castelló está ligada al salitre y a la pesca. La Cavalcada de la Mar rememoró ayer los orígenes del distrito marítimo y reforzó su planteamiento original y presentó una muestra costumbrista tal como se proyectó en el primer desfile de 1957. Los aspectos más historicistas se recuperaron en los años 90 con la aparición de estampas costumbristas y ayer se potenció esta idea.

Unas 3.000 personas y 5o0 collas y peñas se dieron cita en el pregón anunciador de las fiestas de Sant Pere del Grau, que se celebrarán del 24 de junio al 2 de julio. La Cavalcada la abrió la colla de dolçainers i tabaleters, y continuó con la parte mitológica con la presentación como novedad de un dios Neptuno de tres metros de altura acompañado de cuatro sirenas. Después llegó el turno de la sección histórica con el desfile de los Moros d´Entrilles y la Germandat dels Cavallers de la Conquesta. La mitología y la historia dieron paso a una de las partes más apreciadas de la Cavalcada como la recreación de los oficios del mundo marino, con la participación de peñas, collas, asociaciones, colectivos cívicos y Ampas de los centros escolares del Grau. Luego, asociaciones y centros de jubilados sorprendieron a los espectadores escenificando estampas del Grau del siglo XX.

Las reinas de las fiestas, Laia Tirado y Edurne Giner, cerraron la Cavalcada más «grauera» de los últimos años.