La política hace curiosos aliados y sorprendentes enemigos, más si cabe en la actual coyuntura de ausencia de mayorías absolutas y divergencia de colores. La prueba la encontramos en el maratoniano pleno municipal celebrado ayer en el Ayuntamiento de Castelló, en el que el Pacte del Grau volvió a quedar echo trizas y en el que PSPV y Compromís tuvieron que buscar al PP como aliado para salvar el principal punto del día: una modificación de créditos de 14,5 millones de euros que permitirá, entre otras actuaciones, adquirir por 6 millones la parte privada que aún quedaba en el antiguo acuartelamiento de Tetuán XIV.

Los movimientos empezaron en la previa del pleno, cuando el gobierno municipal, en manos de PSPV y Compromís, ya sabía que sus socios del Pacte del Grau, Castelló en Moviment, habían decidido votar en contra de esa modificación al considerar que se habían incumplido determinadas promesas debatidas durante los últimos días. Fue en este momento cuando hubo una negociación con el PP, que había presentado hasta seis enmiendas en este punto, y de estas conversaciones a última hora llegó el respiro para el gobierno local: se incluirían tres de las propuestas del PP y el grupo popular, a cambio, apoyaría la modificación de crédito.

Este acuerdo dejó sin efecto la estrategia política de CseM, quien lamentó que PSPV, y sobre todo Compromís, «se hayan prestado a este juego de trileros para pactar con el PP el voto que les de solución» a la modificación de créditos, según señaló en el pleno el portavoz de la formación asamblearia, Xavi de Señor.

CseM, que tiene habitualmente la llave de muchas de las propuestas y proyectos del gobierno local, había intentando aprovechar esta importante modificación de créditos para conseguir avances en otras materias, como así fue reflejando en el debate plenario Del Señor. En concreto, se habían logrado avances para priorizar acuerdos con bancos que ofrezcan viviendas sociales y que se vinculase el bono Activa't a las rentas de manera individual. El problema era el de desbloquear de una vez las bases para impulsar el alquiler de viviendas sociales, algo que el equipo de gobierno no tenía aún preparado para este pleno pese a estar en elaboración.

CseM había pedido por ello trasladar la modificación de créditos al pleno de julio para culminar las bases y, así, garantizar su apoyo al punto, pero el equipo de gobierno consideraba que el compromiso estaba adquirido y que no cabía demora.

En este tira y afloja, y cuando todo apuntaba al fracaso de la modificación de créditos, la negociación final con el PP desinfló la estrategia de la formación asamblearia y dio un balón de oxígeno a PSPV y Compromís. La votación final fue de 19 votos a favor del punto (8 del PP, 7 del PSPV y 4 de Compromís), 4 en contra de CseM y 4 abstenciones de Ciudadanos.

El voto favorable del PP llegó tras aprobarse tres de sus seis enmiendas: aumentar en 12.111 euros el convenio de colaboración con Asociación de familiares de Enfermos Mentales (Afdem), destinar 33.000,00 euros al proyecto MAP de Cruz Roja (Integración laboral de personas mayores de 45 años o familias en situación de extrema vulnerabilidad por tener a todos sus miembros en paro) y aportar 22.819 euros al Hogar Virgen de Lidón. La portavoz popular, Begoña Carrasco, destacó que el PP ha salido «al rescate del bipartito, demostrando coherencia y responsabilidad en beneficio del bienestar de la sociedad castellonense». Xavi del Señor, por su parte, se mostró muy crítico por este acercamiento del PSPV al PP, lamentó que no se haya querido esperar 15 días para tener listas las bases de vivienda social y le reclamó a la alcaldesa que «dé explicaciones a los militantes socialistas».

Compromís

Ignasi Garcia, de Compromís, lamentó por su parte la decisión de CSeM de votar en contra y de justificarla «por esos 15 días, que no hubiesen cambiado nada». Sobre las enmiendas aprobadas al PP, le preguntó a Del Señor «dónde esta el problema» en las tres propuestas aceptadas a los populares.

Por lo que respecta a la modificación de crédito de 14,5 millones de euros, permitirá adquirir al completo el antiguo cuartel del Tetuán XIV con un coste de 6 millones. Con ello, se podrá poner en marcha el centro de atención de enfermos de Alzhéimer, cerrado en 2012, y una reivindicación incluida en el Pacte del Grau, como recordó el concejal de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo.El edil socialista defendió la propuesta, que permitirá la creación de «un gran centro de infraestructuras municipales». Además de la reapertura del centro de Alzhéimer, se prevé la construcción de un helipuerto y la habilitación de una sede para las brigadas municipales. En la misma operación se conseguirá liquidez para la amortización anticipada de la deuda en unos 8 millones de euros, de los que dos millones provienen de los excedentes de las inversiones financieramente sostenibles del último año.