El trabajo realizado por la dirección deportiva y cuerpo técnico del Peñíscola RehabMedic ha dado sus frutos con el cierre de una plantilla ilusionante antes de finalizar el mes de junio para la próxima temporada.
En cuanto a los jugadores se refiere, la portería estará defendida por un histórico del club, el benicarlando Iván Reverter, junto al internacional Juan Molina, además de contar con un tercer portero de entre los del filial juvenil.
La posición de cierre, la que más se resintió en la recta final de la pasada temporada, gana robustez y músculo con el fichaje del internacional guineano Tobe y del brasileño Bagatini, más la recuperación plena de uno de los ídolos de la afición: Carlinhos.
La posición de ala zurdo queda suficientemente cubierta con la seriedad y fiabilidad de un Campeón del Mundo como Lucas Bolo, y la clase y el chut de Terry, cuya cesión se ha prolongado un año más gracias a las buenas relaciones que el club mantiene con Movistar Inter.
El ala diestro contiene y mezcla las mejores cualidades de un jugador de fútbol sala: la pelea y el compromiso de Iván Rumbo con la clase y fiabilidad de Rubén Orzaez, la imaginación de Esteban Cejudo, las ganas y juventud de Jaime Peiro y, por supuesto, la garra y la calidad de Michel, sin duda alguna una apuesta segura para una próxima internacionalidad.
El cuadro anterior se completa con dos de los mejores pívots del panorama nacional, cuya aportación conjunta la temporada anterior se aproximó a los 50 goles: el brasileño Mauricinho y el almeriense Juan Emilio.
Se trata, sin ningún género de dudas, de una plantilla que ilusionará una temporada más a la mejor afición del fútbol sala español, la del Peñíscola RehabMedic, que volverá a pelear por seguir creciendo.
