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Castelló pide adherirse al Institut Ramón Llull para proyectar la lengua propia en el exterior

La concejalía de Normalización Lingüística propondrá en el pleno la incorporación dentro de la red de ciudades valencianas

Castelló pide adherirse al Institut Ramón Llull para proyectar la lengua propia en el exterior

La concejalía de Normalización Lingüística va a proponer en la próxima Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Castelló que la ciudad se adhiera a la Xarxa de Ciutats Valencianes Ramón Llull. Se trata de una iniciativa que se enmarca en las propuestas reflejadas en la Carta Lingüística, que aprobaron los partidos firmantes del Pacte del Grau, y en la que, aunque no figura en el texto de manera específica, esta adhesión sí que recoge la voluntad de promover el uso social de la lengua propia.

Más allá de las ciudades valencianas fundadoras (Morella, Gandía, Vinaròs y Sueca), ya forman parte de la Fundació Ramón Llull los municipios de Azteneta, Benicarló, Benicàssim, Nules, Onda, La Salzadella y Vistabella. La adhesión de Castelló cuenta con el visto bueno de la Comisión de Estudio del Área de Gobierno Abierto y Participación del consistorio castellonense, así como de los servicios jurídicos del ayuntamiento y se presentará para su aprobación en el pleno del próximo 13 de julio.

La Xarxa de ciudades valencianas forma parte de la Fundació Ramón Llull. Una entidad de promoción en la que participan el Institut Ramón Llull y el Govern d'Andorra en un primer lugar, pero al que se incorporaron diversas administraciones que gestionan territorios que comparten el mismo idioma, como el Consejo General de los Pirineos Orientales, en Francia, o el Ayuntamiento de l'Alguer, en Italia. Cabe apuntar que el Institut Ramón Llull se organiza en forma de consorcio y está integrado por la Generalitat de Catalunya, el Ayuntamiento de Barcelona y el Govern de les Illes Balears.

La propia Xarxa nació en 2008, como respuesta a la negativa de la Generalitat de incorporar la entidad a la fundación debido a la política de los gobiernos populares que abogaba por separar el valenciano y el catalán. Cabe apuntar que el actual presidente de la Generalitat, Ximo Puig, fue el impulsor de esta entidad cuando ocupaba la alcaldía de Morella. De hecho, el acto fundacional se celebró en la capital de Els Ports y cuya carta de adhesión firmaron también Sueca, Gandía y Vinaròs.

La Fundació Ramón Llull tiene como objetivo «intensificar el estudio, la promoción y la defensa de la lengua catalana y fomentar la proyección exterior de la lengua y de los diferentes ámbitos culturales que en ella se expresan». En la argumentación para que el consistorio apruebe la incorporación a la Xarxa, se aduce que el objetivo de tal finalidad es «la promoción de la lengua y cultura propia de los valencianos, la celebración de cursos, congresos y seminarios, la concesión de becas (...) y la concertación de acuerdos con instituciones, universidades y asociaciones».

En este sentido, el texto destaca «la vía abierta» por parte de la Acadèmia Valenciana de la Llengua y el propio Instituto Ramón Llull para financiar lectorados de lengua y cultura en las universidades europeas.

En este sentido, la Generalitat y el Instituto Ramón Llull han firmado distintos convenios colaboración. En concreto, en mayo de 2017, la conselleria de Educación, que dirige el castellonense Vicent Marzá, renovó el acuerdo para la promoción del valenciano en universidades del exterior de la Comunitat Valenciana, de Cataluña y de las Islas Baleares en los que se impartirán estudios de lengua, de literatura propias.

Además, el Institut Ramón Llull, la Universidad de Cambridge, la Acadèmia Valenciana de la Llengua y la Universitat Jaume I acordaron el mantenimiento del programa de estudios Catalan Studies, impartido en Cambridge y que cuenta con tres grupos de estudiantes de nivel inicial y un grupo de nivel avanzado.

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