Una de las caras nuevas del Villarreal B 2017-18 es el joven lateral zurdo Enric Franquesa que llegó procedente del Barcelona B, aunque la temporada pasada estuvo cedido primero al Sabadell y después en el Gavà, equipo éste con el que lucho como un jabato para eludir el descenso casi en la última campana. «Allí viví una experiencia diferente. Un aprendizaje enriquecedor de algo que nunca había vivido. No cambiaría por nada esa etapa, que me hizo aprender mucho y espero que me sirva ahora en este nuevo destino», dijo el joven futbolista.

Llega a otro filial, el amarillo, con «buenas sensaciones» y con «ganas de conocer bien este club que tanta fama tiene a nivel de cuidar a su cantera». Para el presente curso liguero hay cinco caras nuevas en la plantilla, sin contar los chavales que dan el salto del Villarreal C. «Es cierto que hay pocas caras nuevas y que esta temporada la entidad ha apostado por gente de la casa, pero con un filial muy joven», dijo.

Se prepara para lo que será una apasionante temporada 2017-18 en el grupo III de Segunda B que será de armas tomar. «Sólo tengo un año de experiencia en a categoría, la de la campaña anterior, pero sí que te paras a analizar el grupo y ves equipos como el Mallorca B y Elche que acaban de descender, más los que ya habían, y el grupo será muy competitivo», comentó el lateral izquierdo del Villarreal B.

Enric Franquesa Dolz (San Cugat del Vallés, 26 de febrero de 1997) se formó en las categorías inferiores del Barcelona, donde ingresó en verano de 2006. Allí fue escalando puestos hasta finalizada su etapa juvenil. En su último año debutó en Segunda B con el Barcelona B, el 27 de marzo de 2016 en el campo del Llosetense (0-2). Y en el presente curso liguero fue cedido primero al Sabadell, donde no tuvo suerte (8 partidos y 297 minutos), y desde enero en el Gavà donde tuvo una destacada participación y además logró aportar su granito de arena para lograr la permanencia (16 partidos y 1.398 minutos).