El Ayuntamiento de Castelló ha convocado la sesión constitutiva del Consejo Municipal de Inspección, una de las iniciativas previstas dentro del plan de control tributario impulsado desde la Concejalía de Gestión Municipal dirigida por Antonio Lorenzo. Este consejo tiene como misión «identificar, analizar y proponer mejoras de carácter transversal en las actuaciones de control o inspección de diferentes áreas, negociados o unidades del ayuntamiento para mejorar su eficacia y eficiencia y de esta manera facilitar el ejercicio de actividades y prestación de servicios», según ha explicado el edil.
A propuesta de la Administración Tributaria Local, este nuevo organismo tendrá un carácter político-técnico, por lo que estará integrado por el concejal de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo; el de Ordenación del Territorio, Rafa Simó; y el de Transparencia y Modernización, Ignasi Garcia, así como representantes técnicos de las diferentes áreas con competencias en materia de control.
El plan de control tributario municipal se desarrollará hasta 2019, con dos líneas de trabajo fundamentales: mejorar la atención al contribuyente y potenciar la investigación del fraude tributario. «Todos los ciudadanos tenemos la obligación constitucional de contribuir al sostenimiento de los gastos públicos, de acuerdo con nuestra capacidad económica y para ello es preciso contar con un sistema tributario justo», ha afirmado la alcaldesa, Amparo Marco, quien ha añadido que el Ayuntamiento ha de contar con los ingresos necesarios para las políticas sociales y de empleo.
El Consejo Municipal de Inspección se ha convocado para la próxima semana, en una sesión en la que se aprobará la constitución y se prevé plantear que cada área aporte sus propuestas de inspección para priorizar las actuaciones y convocar los diferentes grupos de trabajo que después deberán dar cuentas al Consejo.
