No será por los mimos que recibe desde los despachos, desde la grada o desde los medios de comunicación, pero este Castellón 2017-18 con la expectación que la levantado sigue sin convencer por su juego desplegado y ni muchísimo menos por los resultados obtenidos. Tras ganar las dos primeras jornadas de Liga, ahora el conjunto albinegro acumula tres jornadas sin conocer la victoria, con dos tempates y una dolorosa y a la vez sorprendente derrota en Castalia contra el Almazora (0-1, en el minuto 92).

Por unas razones u otras la escuadra de la capital de la Plana aparece y desaparece con una pasmosa facilidad. Lo que está claro es que el equipo no está dando todo lo que de el se espera. Es conocida la calidad de la plantilla porque reúne a futbolistas que su gran mayoría ha jugado en Segunda División B.

Lo único cierto es que en los cinco encuentros disputados el Castellón ha jugado a ratos, pero no enamora con su juego. A la inmensa mayoría le importa poco el que su equipo le enamore jugando al fútbol de alta escuela porque lo que se quiere es ver ganar a su equipo para acumular el mayor número de puntos, meterse en la fase de ascenso y subir a Segunda B, que sin ser el paraíso terrenal sí que sería un alivio, y el paso previo para regresar al fútbol profesional. La Tercera cansa y desgasta.

Es cierto que esto no ha hecho más que comenzar, pero también es verdad que otros equipos han arrancado con más fuerza. Sin ir más lejos el que todos indicaban como el equipo que podría marcar las diferencias, el Eldense, las está marcando a pesar de contar en estos momentos con un plantilla muy corta. Trece puntos sumados de quince posibles.

El calendario

Y a todo ello toca espabilar porque el calendario no es el más propicio, visto lo visto. Villarreal C, Roda, Rayo Ibense, Eldense (entre semana), rivales todos ellos distintos, pero complicados por su forma de jugar. Para empezar este domingo llegará el segundo filial amarillo. El equipo de Pere Martí no está atravesando su mejor momento con las dos derrotas consecutivas encajadas. Tampoco el Castellón. Su arranque fue extraordinario a nivel de resultados (dos triunfos). Pero fue ganar al Buñol en Castalia y después acumular tres jornadas sin conocer la victoria. Empate en la matinal ventosa de Paterna (1-1), derrota en casa ante el Almazora (0-1) y otro empate en Crevillente (2-2).