El barrio de la Mercè de Borriana celebra este fin de semana la fiesta en honor a la Virgen de la Mercè, y ayer lo hizo con un evento muy particular y que consigue reunir cada año a centenares de personas en torno a la iglesia y la plaza con el mismo nombre de la virgen.

Un año más, y siendo fieles a la tradición popular, los «cabuts» de la Mercè salieron a la calle alrededor de las 19 de la tarde para ser los protagonistas de una batalla en la que los niños intentaron derrotar con palos a personajes como el Dimoni, el Pirata o el Limonero.

El acontecimiento lleva celebrándose desde hace décadas y en sus inicios los personajes, muchos de los cuales han sido restaurados y siguen saliendo a las calles, realizaban los típicos bailes y movimientos del resto de 'collas' de cabuts, aunque poco a poco esta danza se transformó en una especie de enfrentamiento en el que las carreras y los varazos por la Plaza de la Mercé están asegurados.

Si normalmente para librar esta batalla se utilizaban palos de cartón, desde el año pasado el ayuntamiento decidió cambiarlos por bastones de plástico hinchables, para minimizar el impacto de los golpes y hacer de la celebración una fiesta más segura, tanto para los niños como para los jóvenes que interpretan a los cabuts. Es por ello que el consistorio repartió 1600 de estos nuevos bastones.

Hoy se celebran los actos más solemnes, ya que, a partir de las ocho de la tarde tendrá lugar tanto la misa en honor a La Mercè como la posterior procesión en la que se espera gran participación.