Le costó abrir la lata al Castellón B ante un buen Benicarló. Le costó tanto como 83 minutos, pero el gol acabó cayendo hacia el lado del equipo que más lo intentó y ese fue el filial albinegro. Eso sí, se consiguió sumar los tres puntos ante un digno riva al que pocos contrincantes lograrán hacerle hincar la rodilla. Marcó el moncofense Amine en el minuto 83, y después puso la rúbrica Raúl Ahibar, ese delantero alto como una torre que lleva el gol en sus venas.

El primer tiempo estuvo marcado por el clamoroso penalti no señalado sobre Raúl Ahibar por agarrón dentro del área (min. 8), por los mano a mano errados por Pablo Roig y Marc Almela (entre los minutos 17 y 24), eso sí, con buenas intervenciones del arquero Álex Segarra, y por las buenas maneras que apuntó el Benicarló de Dani Domingo, un equipo al que es muy complicado jugarle porque se defiende con orden y acierto y encima a la hora de salir dan pánico.

El Castellón B llevó el peso del partido, pero por momentos se le iba el control de la situación. De hecho, los benicarlos aguardaron su ocasión a la contra. En el primer tiempo no lanzaron entre los tres palos. Mientras, el filial se hartó de tocar y penetrar por las dos bandas, pero delante se erraba estrepitosamente.

La segunda parte fue un calco de la primera mitad, pero con gran cantidad de cambios en los dos equipos. El gol se seguía echando de menos en el encuentro. En el arranque, el Castellón B dispuso de una doble ocasión con Raúl Ahibar y Marc Almela (minuto 57). El Benicarló tuvo su ocasión en el minuto 78 por mediación de Jairo, pero el 1-0 llegó en el 83 para los castellonenses. Saque de esquina botado por Jordi Pitarch y remate a la red de Amine. Golazo. Sin solución de continuidad llegó el 2-0 de Raúl Ahibar para cerrar el primer triunfo en casa del filial albinegro.