En cualquier caso es llegado el momento de distribuir el esfuerzo, distribuir los minutos a jugar por cada cual, según sea la capacidad de recuperación de cada quisqui, dado que la naturaleza de cada cual responde a características diferentes. Como quiera que de entre la plantilla una minoría ha disputado menos partidos, es llegado el momento para Semedo o Ünal y aquellos que, habiendo ascendido del filial, esperan su oportunidad para consolidarse como cualquier otro jugador de la plantilla. Visto de otra manera, y haciendo de la necesidad, virtud, los que juegan menos pueden tener su oportunidad y los servicios técnicos dirán, puesto que son ellos los que conocen las posibilidades reales de cada cual. El problema se transferirá a los aficionados, como es bien sabido todos ellos entrenadores en potencia.

El verano se acaba de ir espantado por el fútbol dueño y señor ya, por fin, de las tertulias a la hora de lo que aquí llamamos almuerzo, donde entre pinta y pinta cada cual sienta cátedra de cuánto sabe, sin haber asistido jamás a contemplar un entrenamiento. Es decir, sin disponer de información alguna del cómo y el qué de cada uno de los profesionales, sus estados de forma física pero también de la otra, digo de aquella que anida en el cerebro de cada cual, siempre ser humano antes que futbolista.

Como al Estadio de la Cerámica lo han opuesto guapo, los días de partido apetecen, si bien los horarios no siempre se compaginan bien con la tarea de cada cual. La supertribuna que se acaba de estrenar es una cucada, con dotación de ascensor para subida y bajada, más el catering para un bocadito y un trago en el descanso si bien antes y después de partido sigue funcionando. A més a més, han sido instalados monitores para que el personal pueda ver con nitidez el gol de los nuestros o la repetición de la jugada. Una cucada, ya digo.

Entre la lluvia de partidos con premio que le esperan al submarino, este jueves llega el que le puede confirmar en el primer lugar de la clasificación de su grupo y pasar a la fase siguiente, donde las dificultades aumentan pero a su vez lo premios son más y más gordos según se avance hasta llegar a la final. El Sevilla es un especialista y el Villarreal un aspirante, cuya potencialidad ha aumentado con la llegada de Calleja al banquillo. Él mismo, con el resto de profesionales al servicio de los intereses del Villarreal, tienen el deber de intentarlo, porque talento no sobra, pero es alto, de modo que esta puede ser la temporada que estábamos esperando para celebrar algo inaudito.

Ya sé que a los dirigentes esta clase conjeturas no les gusten demasiado, tal vez porque se tema que la decepción. Si una vez se estuvo a punto de llegar a la final de la Champions, lo que impidió el fallo de Riquelme en el penal y son palabras mayores, ¿ por qué no soñar, puesto que es gratis?