El Ayuntamiento de Almassora ha puesto en marcha la segunda edición del Certamen Foment de l'Esperit Emprenedor, que en esta ocasión cuenta con el apoyo de UBE y cuyo objetivo fundamental es fomentar la iniciativa entre los jóvenes de secundaria, bachillerato y ciclos formativos del municipio. Todos ellos deberán desarrollar sus proyecto de negocio para optar a los premios en metálico de hasta 800 euros que contempla este concurso.

Igual que en la anterior convocatoria, el jurado valorará las propuestas presentadas por los estudiantes en las categorías de Idea y de Plan de Empresa, en las que también tendrán en cuenta «la vertiente social y los beneficios para el conjunto de la población» que las iniciativas puedan reportar, tal como explicó el concejal de Juventud, Xavier Trenco. «Para el Ayuntamiento de Almassora es importante que la juventud tome la iniciativa en cuanto al desarrollo de proyectos empresariales, pero también que lo hagan pensando en la economía social y del bien común y en aquello que pueden aportar para mejorar el espacio en el que viven».

Como parte del proyecto, el personal técnico del Centro Europeo de Empresas Innovadoras (CEEI) de Castelló ya ha comenzado a realizar charlas formativas en los IES Álvaro Falomir y Vila-roja. El alumnado podrá presentar sus propuestas hasta el próximo 29 de enero. Las y los creadores de las iniciativas elegidas, deberán presentarlas ante un jurado en el que estarán representadas diferentes entidades empresariales de las comarcas de Castellón, así como la compañía UBE, CaixAlmassora y el propio Ayuntamiento de Almassora.

Así pues, los jóvenes que opten a los premios de mejor idea deberán realizar un estudio de mercado, apoyados por el profesorado. El jurado valorará la originalidad y la viabilidad de las propuestas, así como la redacción y la presentación final. Por su parte,quienes opten por desarrollar un plan de empresa aprenderán a analizar aspectos como la relación con el cliente, los segmentos de mercado, las fuentes de ingresos o las estructuras de costes, todas ellas áreas que deberán trabajar en sus proyectos. En este caso, el comité evaluador tendrá en cuenta la estrategia comercial, el impacto en el territorio o la diferenciación.