Natural de Beas del Segura (Jaén), Fernando Alonso llegó a Benicàssim cuando era un adolescente y, a día de hoy, asegura que «se lo debo a todo a Benicàssim». En este municipio ha formado una gran familia y tras trabajar de electricista o celador llegó al CEIP Santa Águeda donde ejerció de conserje desde 1984. Con los 65 años cumplidos este mes de noviembre, Fernando Alonso se ha jubilado y cierra una bonita etapa en el colegio de Benicàssim.

Cuente un poco sus inicios como conserje en el CEIP Santa Águeda.

Al año de estar trabajando como celador en el ambulatorio de Benicàssim, Pilar Castaño me dijo que había una plaza como conserje en el colegio, y me presenté y al final conseguí el puesto. El primer día no lo olvidaré nunca. Era un 7 de enero y hacía un frío que pela. Me presentaron al que hasta entonces era conserje, Juan, y me enseñó todo lo que necesitaba saber.

¿Y cómo calificaría sus 33 años como conserje?

Ha sido una experiencia maravillosa, excepcional, de categoría. A mi me gustan mucho los niños y es que la esencia de un buen conserje es que te gusten los niños. Si te gusta estar con ellos, puedes con todo.

En cuanto a la relación con los concejales de Educación y los directores del centro, aunque ha habido épocas no muy buenas, ha habido personas con las que no he tenido ningún problema, com cuando Rosa Mª Gil estuvo de concejala, con Gustavo Ramón, Francesc Colomer. Y con los directores, aunque con Jose Luís Tárrega (ya jubilado) tuviese alguna discusión, sana y normal, le considero un buen amigo.

Desde su punto de vista ¿cómo ha evolucionado la educación?

De una manera impresionante. La tecnología se ha llevado todo por delante. Antes los niños salían más a la pizarra a hacer multiplicaciones y ahora con la calculadora, la informática, se piensa mucho menos. Pero también es verdad que las pizarras digitales tiene sus ventajas.

Por otro lado, también ha evolucionado el tiempo que pasan los niños en la escuela. En el Santa Águeda hay niños que entran a las 7 horas a la Escola Matinera y no salen hasta las 17 horas, o a lo mejor también se quedan a otra actividad extraescolar. ¿Cuándo podrá ese niño ir a jugar a la calle, relacionarse?.

Tras su experiencia, ¿podría decir que la escuela pública es una escuela de calidad?

Únicamente puedo hablar de mi experiencia en el Santa Águeda, pero lo que sí que puedo decir es que en el CEIP Santa Águeda hay muy buena experiencia y tiene a muy buenos profesionales .

Por último, ¿qué va a hacer ahora con tanto libre?

Seguro que no me voy a aburrir. Yo no soy de cartas y poleo; tengo un huerto de hortalizas, animales, realizo manualidades, así que seguiré con estas distracciones que son muy buenas.