El municipio de la Vall d'Uixó ha registrado un nuevo acto vandálico, y en este caso, la víctima ha sido la ermita de la Sagrada Familia.

Como informó la Policía Local, la capilla sufrió un robo y, además de los daños materiales que se produjeron al forzar la puerta, una de las imágenes del interior, la de un monaguillo, había desaparecido, aunque tras las investigaciones realizadas, se localizó la figura que había sido abandonada en una zona de montaña.

La puerta de la ermita dañada data del siglo XVII.

Tras ello, la policía comunicó que se va a intensificar la vigilancia en las áreas que son patrimonio de la localidad. La alcaldesa, Tania Baños, también avanzó que se van a estudiar medidas de vigilancia y se incrementará la presencia policial.

Y es que esta no es la primera acción vandálica que ataca al patrimonio del municipio de la Plana Baixa ya que en los últimos meses la fachada de la iglesia de l'Assumpció también había sido objeto de vandalismo.

Durante estos últimos meses, el ayuntamiento y la Policía Local están trabajando en reforzar la seguridad y ya comentaron que se está estudiando poner de nuevo en funcionamiento el sistema de cámaras de vigilancia de tráfico, con la redimensión de la red wifi.

Además de los daños a las iglesias, el mobiliario urbano también ha sido dañado en los últimos meses y como ya se informó, el ayuntamiento gasta más de 60.000 euros al año en arreglar o sustituir columpios, bancos o papeleras, entre otros. La plaza del 9 d'Octubre, Paratge de Sant Josep o plaza dels Xorros son sitios donde ya se ha reforzado la vigilancia para poder disminuir el número de actos vandálicos. Además, también se destaca que el columpio de l'Assumpció ha sido destrozado en dos ocasiones, lo que supone un coste añadido a las arcas municipales.