cuando los eventos falleros son conmemorativos, llámense aniversarios o reconocimientos actos en los que no hay clasificaciones ni premios que otorgar, las comisiones falleras de Borriana participan de forma familiar. Sin embargo, la satisfacción no alcanza a todos aquellos que quieren participar o asistir al evento. El 75 aniversario de la Junta Local Fallera que se celebra hoy sábado se vivirá una parte importante en la calle porque el Teatro Payà no da para todo el mundo fallero.

En este evento en el que participarán un centenar de reinas falleras entre mayores e infantiles, la banda municipal de Borriana que dirige Norma Comes Vidal estrenará el pasodoble que ha compuesto expresamente para este aniversario. Tendrá un recuerdo especial Francisco Vilanova, el cual durante muchos años cerró las presentaciones de las reinas cantado el himno de la Comunidad Valenciana. María Teresa González Reverter que fue reina fallera en 1951 es la reina mayor de las que van a participar en este evento. El pregonero oficial Antoni Gil Trilles, mantenedores Josep Palomero i Almela, el cual esbozará un importante apartado literario de los mantenedores que ha tenido esta fiesta en los 75 años y Javier Gual Rosell basará su intervención en la importancia del trabajo de la Junta Local Fallera. Uno de los apartados importantes para la ciudadanía en general y sobre todo para aquellas mujeres que viven pendientes del traje de fallera y de la evolución que este tradicional vestido ha tenido en los 90 años de historia que tienen las fallas de Borriana. Los trajes de fallera en esta ciudad, se guardan, forman parte del recuerdo de los buenos años vividos en estas fiestas josefinas por lo que el desfile dará buena muestra. El trayecto desde el ayuntamiento hasta el Teatro Payà será todo un acontecimiento donde se podrá apreciar toda la evolución que ha tenido este traje en los últimos 70 años. También se podrán apreciar los trajes de las damas de la ciudad.

Hasta que se consideró que las fallas deberían tener unas normas a seguir, las fiestas se celebraban más en los barrios donde se plantaban las fallas, monumentos que se construían con el mayor secreto posible, se montaban a partir de las doce de la noche de la plantà para sorprender a la ciudadanía. Con la Junta Local Fallera, llegaron las normativas a seguir por todas las comisiones, los monumentos se premiaban según la calidad artística, esta cualificación la realizaban falleros de València, en la actualidad los premios los conceden las comisiones de la localidad por votación que se hace pública. En cuanto a las falleras, las que representaban a las demás de la ciudad, el día de la presentación subían al escenario acompañadas por miembros de la corporación municipal, las damas de honor por componentes de Junta Local Fallera y el alcalde o alcaldesa hacía lo propio con la reina fallera, tanto en las mayores como en las infantiles. Hoy en día solamente la alcaldesa impone la banda a la reina de la ciudad, las componentes de la corte de honor y damas de la ciudad suben solas al escenario. Los cambios que se han realizado a lo largo de los 75 años de JLF siempre han estado consensuados por las comisiones falleras, las fallas han evolucionado con los años y la Junta Local ha sabido estar en todo momento con las comisiones.