Los nadadores del Club Natació Vinaròs cambiaron este sábado, en la segunda jornada de la liga autonómica de promesas, su identificativo gorro rojo por otro de color negro en señal de protesta por la pérdida definitiva de la piscina municipal cubierta.

Tanto desde el club de natación como desde Cocemfe Maestrat, que engloba al club de deporte adaptado Bamesad, han culpado tanto al equipo de gobierno como a la oposición por perder de este proyecto. Cabe recordar que el proyecto de la piscina municipal cubierta fue incluido en su día dentro del Plan Confianza por el equipo de gobierno formado por el PSPV-PSOE y PVI. Un proyecto que fue reemplazado bajo gobierno del PP por el del carril lúdico deportivo a la ermita. El actual equipo de gobierno decidió recuperar el proyecto de la piscina e inició su tramitación, llegándose a aprobar su sustitución en el pleno del 11 de julio de 2016. Ahora ese pleno ha sido anulado por el juzgado número 2 de Castelló tras una denuncia formulada por los concejales del PP, que aceptó la fiscalía, al no haberse incluido en la documentación que se llevó al pleno el informe los correspondiente informe que justifica el cambio.

Pleno para pedir la dimisión

El ayuntamiento celebrará esta mañana un pleno extraordinario solicitado por los populares durante el cual pedirán las dimisiones del alcalde, Enric Pla, los primeros tenientes de alcalde Guillem Alsina y Domènec Fontanet, y la concejal de Deportes, Begoña López, a los que responsabilizan de perder el proyecto.

Por otro lado, el presidente del Club Natació Vinaròs, Manolo Ramírez, responsabilizó «a todo el conjunto de políticos del Ayuntamiento» de la pérdida de la piscina. Así, dijo que «en principio se aprobó hacer la piscina, unos políticos echaron tierra encima, se volvió a recuperar el proyecto y ahora se le ha vuelto a echar tierra y se ha perdido definitivamente». Ramírez dijo no entender, «la postura de los políticos que nos representan y cómo pueden echar atrás un proyecto tan necesario y solicitado por la ciudadanía». Asimismo, Ramírez apuntó que «hace ya 10 años que los socios del club estamos pagando por entrenar en una piscina privada, sin los mismos derechos que otros clubes que gozan de instalaciones públicas, por lo que consideramos que estamos discriminados».