En el contexto de la polémica surgida en las fiestas de mayo, cuando la jerarquía eclesiástica vetó a una persona homosexual casada en la cofradía de Lledó, Castelló en Moviment registró una proposición en el Ayuntamiento de Castelló para excluir de los recursos municipales a las entidades que discriminan en materia de derechos humanos. Pasados cinco meses continúan a la espera del informe técnico sobre esta propuesta. La edil de la formación municipalista, Anna Peñalver, insiste en que «las entidades que discriminan por cualquier razón tienen que perder la condición de beneficiarias de recursos públicos municipales».