La Diputación de Castelló y el Ayuntamiento de Benicàssim firmaron ayer un convenio de colaboración para rehabilitar el palacete de Villa Elisa, que costará 1,8 millones de euros y finalizará en un año con el fin de convertirla en un «referente cultural y académico del litoral castellonense».

La inversión en los trabajos de terminación de la obra del palacete municipal supone un ahorro del 25 % del presupuesto con respecto al precio de licitación de los trabajos y de este montante, la diputación aporta un millón y el ayuntamiento el resto.

Según la corporación provincial, las obras de rehabilitación de la villa comenzarán tras la firma del acta de replanteo que se realizará, según han informado los técnicos municipales, antes de que acabe el año.

A partir de ahí, todo apunta a que pasadas las fiestas de Navidad empiecen los trabajos sobre el terreno, que tendrán un plazo de ejecución de diez meses, por lo que en el último trimestre del año próximo estarán completamente concluidas.

Con este contrato de obra suscrito hoy por la alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués, y la empresa valenciana Construcciones San José, ganadora del concurso de ejecución del proyecto de terminación de la restauración de Villa Elisa, «se da un paso decisivo para hacer realidad cuanto antes uno de los proyectos culturales más importantes de la provincia».

Para el vicepresidente de la Diputación, Vicent Sales, este palacete será «no solo ese gran contenedor de la cultura, sino el gran dinamizador de una oportunidad única para la provincia como es la de aprovechar un edificio emblemático en un paraje incomparable, con unas condiciones óptimas para poder desarrollar los proyectos más ambiciosos».

Por su parte, Susana Marqués valoró el compromiso de la Diputación y, por contra, criticó que la Generalitat «haya incumplido reiteradamente el convenio firmado hace diez años para acometer las obras de restauración de la que tenía que ser la gran sede académica y sociocultural de todo el litoral provincial». «Con esta firma damos un paso más» hacia la finalización del que será «el proyecto más emblemático de la ciudad en este mandato», añadió la edil.

La nueva Villa Elisa verá remodelado completamente su interior dotándolo de sala de exposiciones, sala de actos, salón de recepciones, aulas multiusos y aulas tecnológicas entre otras dependencias que servirán para el correcto funcionamiento de todo el complejo sociocultural.

Además, el edificio auxiliar, es decir, el antiguo almacén, se convertirá en una moderna cafetería que den servicio de restauración al edificio y, probablemente al público de manera abierta. El proyecto de remodelación contempla la actuación sobre toda la parcela de una superficie total de 4.263 m2 y los dos edificios con una superficie construida de casi 2.000 metros cuadrados.