El Grupo Socialista en la Diputación de Castelló apostó ayer por reforzar el discurso municipalista del partido y por reivindicar la ley autonómica de coordinación de las diputaciones publicada en 1983 y que declara algunas funciones atribuidas a estas entidades de interés general para pasar a ser gestionadas por la Generalitat.

En este sentido, Antonio Lorenzo, nuevo portavoz del grupo tras la dimisión del alcalde de Vila-real, José Benlloch, insistió en la idea de considerar a las diputaciones como gestoras de recursos de los municipios y en su función canalizadora de los mismos. «Según nuestro modelo de lo que tiene que ser esta institución, queremos que sean los municipios quienes esencialmente decidan qué hay que hacer con esos recursos públicos», indicó el también concejal en el Ayuntamiento de Castelló.

Lorenzo indicó que desde las elecciones de 2015 el PSPV gobierna en municipios que representan el 80% de la población y en la Generalitat y esta circunstancia, a su juicio, «cambia notablemente el papel que desde la diputación tiene el grupo socialista, que, de alguna manera, trabaja para que las iniciativas que benefician a la provincia y que emanan de la Generalitat sean asumidas muchas veces, no sin resistencia inicial, por parte de la diputación». A este respecto, el portavoz socialista recordó que «nosotros creemos que la diputación es una institución que debe trabajar necesariamente en coordinación con la Generalitat, así inicialmente figuraba en la original ley de coordinación de diputaciones de los años 80 y así creemos que debe ser».

En el plano relativo al partido socialista, Antonio Lorenzo resaltó la idea de que el grupo en la diputación debe trabajar «de manera sincronizada y coordinada con la dirección del partido».

Ernest Blanch ensalza a Puig

El nuevo secretario provincial de los socialistas castellonenses también estuvo presente en este desayuno con la prensa, en una reunión cargada de simbolismo por el hecho de que estaban presentes todos los diputados provinciales que hasta el pasado pleno coordinaba su rival en las primarias del PSPV, José Benlloch. A este respecto, Blanch, al igual que hizo Lorenzo, agradeció el trabajo realizado hasta la fecha, pero insistió en el aprovechamiento de la colaboración y de las sinergias entre la Generalitat y la Diputación de Castelló.

Más allá, Blanch definió 2017 como el «año del militante», por los tres procesos de primarias que han tenido lugar a nivel interno en el PSPV-PSOE y aseguró que el partido ha salido fortalecido del proceso.

A su vez, reivindicó la figura política del presidente de la Generalitat y le atribuyó todos el rédito por haber situado la infrafinanciación de la Comunidad Valenciana en la agenda política y social, así como el debate por la carencia de infraestructuras. De la misma manera reivindicó el papel de Puig en la decisión de interponer un recurso ante el Tribunal Constitucional respecto a la indemnización a la empresa que construyó