El festivo de Reyes del pasado sábado estuvo marcado en la provincia de Castelló por las fuertes precipitaciones y las tormentas, algunas acompañadas por granizo y aparato eléctrico. Las lluvias dejaron hasta 55,7 litros por metro cuadrado en zonas del interior como Morella.
Según el balance de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las precipitaciones también fueron intensas en las localidades de Benassal (50,2 litros por metro cuadrado), Llucena (47,8) y Castellfort (46,5 litros por metro cuadrado).
A estos municipios les siguen las lluvias acumuladas en Catí (36,4 litros por metro cuadrado), Onda y Benafigos (27) y Atzeneta del Maestrat (25,2), las cuatro también en la provincia de Castelló.
Según el observador y meteórologo de Morella, Juan Amela, «las precipitaciones registradas es más que todo lo que se había acumulado en los últimos 4 meses, desde el 1 de septiembre (49,8 l/m2)».
El Consorcio Provincial de Bomberos solo tuvo que actuar en viales secundarios para eliminar placas de hielo. Así, echó sal en la carretera de Hervés a Fredes y en el Mas de la Costa, en Llucena.
Las lluvias fueron débiles en Castelló ciudad, a pesar de las tormentas: 6 litros por metro cuadrado.
