La falta de concienciación sobre las plazas de aparcamiento para las personas con discapacidad aún no ha calado en la sociedad castellonense. Una muestra de ello es la imagen que estos días ha circulado por Facebook y que ha sido comentada por muchos usuarios, entre ellos, representantes de la Plataforma en Defensa de la Llei de la Dependència, el Cocemfe e incluso el concejal del Ayuntamiento de Castelló, Ignasi Garcia. La imagen en cuestión es la de un contenedor de recogida de enseres de una obra y que el martes fue colocada en una de las dos plazas de aparcamiento para discapacitados que hay habilitadas en la calle Echegaray de Castelló. La reacción no se hizo esperar y, tras el impacto en las redes sociales, el ayuntamiento procedió a informar a la empresa para que lo retirara. Ayer mismo, el contenedor ya no estaba en dicha plaza y fue reubicado en una plaza reservada para la zona azul de la calle Trullols.

Desde la empresa apuntaron que el contenedor se ubicó en dicho lugar «por instrucciones de los obreros de allí, que no deberíamos haber seguido». Además, han pedido disculpas y añaden que «esto es una práctica que no solemos hacer, por respeto, e intentaremos no repetir».

Tal como explicaron desde el consistorio castellonense, el ayuntamiento había dado permiso para ocupar la vía pública pero nunca una plaza de discapacitados. Es por ello que, en cuanto se tuvo conocimiento de los hechos se procedió a la retirada, que se hizo efectiva el miércoles por la mañana, según fuentes consultadas por este periódico.

La foto fue difundida por las redes sociales por un vecino de Castelló. En concreto, el contenedor estaba colocado en la plaza para discapacitados de la calle Echegaray, esquina con Trullols, donde se encuentra el Centro de Salud Jaume I. Según la ordenanza, cuando el ayuntamiento concede permiso para la ocupación de vía pública vinculada a una obra, como al parecer es este caso, se exige que los interesados aporten un plano de situación, señalizando exactamente el lugar en el que se va a ubicar, y se les indica que los únicos lugares permitidos son: la acera, dejando 1,50 metros de paso libre para peatones, o un lugar de estacionamiento de vehículos, incluida la zona azul, pero nunca en zonas de carga y descarga, ni en una plaza de estacionamiento para personas con movilidad reducida. Ante una situación como esta, se pude informar a la Policía Local para que lo retire, como así se hizo.

El presidente de Cocemfe, Carlos Laguna, asegura que «no es la primera vez que ocurre». «El primero que llega, sea el conductor del vehículo o algunos de los trabajadores que les acompañan, son los que indican el lugar de la descarga mostrando una insensibilidad total hacia el colectivo de la discapacidad. Esperemos que se haya multado a la constructora correspondiente», añade.