Las fiestas en honor a Sant Antoni y Santa Águeda son las más tradicionales, las que tienen una mayor carga emotiva para los vecinos de Benicàssim.

Y es que como destaca la alcaldesa, Susana Marqués, «estas fiestas rinden culto a los verdaderos patrones de Benicàssim», ya que Santo Tomás de Villanueva, cuyas fiestas se celebran durante el mes de septiembre, es el patrón de la iglesia del municipio. Y es por ello que a las fiestas de enero «se les tiene un cariño especial y son muy participativas», añade la alcaldesa.

La primer edil encara estas fiestas con mucha ilusión «y los pronósticos son muy buenos» por lo que se espera que tantos vecinos como visitantes participen de forma activa en los actos programados durante la semana. Como incide Marqués, las fiestas patronales de Benicàssim volverán a recordar «que nuestros antepasados se dedicaron a la tierra».

En cuanto a los actos que conforman el programa de fiestas, la alcaldesa añade que la tradición y la esencia no se pueden perder y, por tanto, un año más el programa contempla toda una serie de actos para recordar los orígenes del municipio. Un gran reflejo de esos orígenes benicenses se podrán ver el martes por la noche durante la celebración de la Coqueta en la que los vecinos deberán lucir los trajes antiguos.

Dejando a un lado la tradición, Marqués destaca el Día de las Paellas como uno de los actos indiscutibles de las fiestas benicenses.