El Castellón resucitó tres meses después (93 días después). Ganó al Villarreal B y encarriló el partido de la manera más curiosa posible. Andrei Pentelescu lanzó a portería, el balón rechazó en el colegiado Aly Ezaydy y engañó al portero Jaime Durán. Era el minuto 44 y con el 2-1 se llegó al descanso. Luego, en un segundo tiempo muy disputado y peleado a más no poder por las dos escuadras, el triunfo se decantó a favor del necesitado conjunto albinegro, que once jornadas después volvió a sonreír. Lejos quedaba aquel 12 de octubre cuando se ganó por última vez (3-4 al Don Bosco).

Los chavales del Castellón entendieron que este partido se tenía que ganar sí o sí. Se pusieron manos a la obra. Salieron a por todas. Por la izquierda, con un gran Aaron Romero y David Isierte, se generó mucho peligro. Andrei Pentelescu golpeó primero, replicó Alfonso Arnedo, y antes del descanso repitió Andrei, con la colaboración del árbitro.

El segundo tiempo fue de infarto. El 3-1 lo anotó Pere Julbe en una contra tras un córner del Villarreal B. Y con el equipo amarillo presionando, el debutante Eric Fornós, en propia portería, le dio salsa y emoción hasta el pitido final.