La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana acogió ayer el juicio por la demanda presentada por los extrabajadores de la piscina provincial de Castelló por su despedido a raíz del concurso de acreedores presentado por la entonces adjudicataria de la instalación, la firma Aiguagest S.l.

En la demanda, los extrabajadores (en total 36 operarios) solicitaron al tribunal que declare nulos los despedidos por defecto de forma, entre otras cosas, porque la mercantil incumplió todos los trámites legales recogidos en el Estatuto de los Trabajadores.

Los extrabajadores también solicitaron que se declare la responsabilidad civil subsidiaria de la Diputación de Castelló, como propietaria de las instalación, en el supuesto de que la Sala de la razón a los exempleados. Si se da este extremo judicial, los trabajadores podrían reclamar el abono de los salarios desde el momento de su despido hasta la actualidad.

Tras la quiebra de la adjudicataria, la piscina provincial cerró el pasado día 1 de agosto y así permanece, más de medio años después. Y todo ello, pese a que la Disputación ha vuelto a adjudicar la explotación de la instalación a otra mercantil, en este caso la mercantil Impala.

El gobierno provincial, en manos del PP con mayoría absoluta, ha anunciado en las últimas semanas su compromiso de reabrir al público la instalación, así como el compromiso de la nueva concesionaria de asumir a los trabajadores de la anterior adjudicataria. Con todo, la decisión última sobre la subrogación o no delos empleados en última instancia esta en manos de los trabajadores.

La diputación esgrime en defensa de la demora que acumula reapertura de la piscina provincial, primero en temas judiciales, contar con la autorización definitiva para entrar en la instalación, extremo que no se produjo hasta finales del pasado año. Y tras superar esta traba judicial, los técnicos de la corporación procedieron a la inspección de las instalaciones. Este informe concluyó con que los trabajos e, inversión, para l,a puesta en marcha del centro eran mayores de lo estimado inicialmente.

La dilatación en el tiempo de la reapertura ha llevado a los trabajadores ha denunciar la falta de comunicación con el equipo de gobierno. «Nos han dado la espalda», aseguran en alusión al diputado de deportes, Luis Martínez.