La provincia de Castelló está en las primeras posiciones del listado nacional en el ámbito de la reducción de los índices de criminalidad. Según datos ofrecidos ayer por el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, la provincia cerró 2017 con el mejor registro de la serie histórica y se ha situado en 39,5 delitos por cada mil habitantes, cuando en el año 2007 ese dato era de 50,1, es decir una reducción de casi 20 puntos.

Si en la lista estatal, la provincia se sitúa a entre los territorios punteros,m en el ámbito de la Comunitat Valenciana sí que ejerce un liderazgo absoluto. En la provincia de València la tasa de criminalidad se sitúa en 44,9 infracciones por cada millar de habitantes y en la de Alicante, en el 49,5.

El dato global de la criminalidad en la Comunitat Valenciana ha quedo fijado en 46 infracciones por cada mil habitantes. Esta cifra coloca a la Comunitat en el listado por comunidades autónomas, tras Baleares, Madrid, Cataluña, Ceuta y Melilla. En la provincia de Castelló, según los datos ofrecidos ayer por el Delegado del Gobierno, la tasa de criminalidad es una de las más bajas de España y aun así sigue descendiendo cada año, es cinco puntos por debajo de la media en España que se sitúa en 43,9 infracciones cada mil habitantes. El año 2017 se cerró con el mejor registro de la serie histórica y se ha situado en 39,5 delitos por cada mil habitantes. Respecto al año 2007, es decir en la última década, el descenso ha sido de más de 20 puntos, ya que en el año 2007 esta tasa se situaba en 50,1 delitos cada mil habitantes.

En cuanto al número de infracciones penales en Castelló, el descenso al cierre del año 2017 ha sido del -4,9 % respecto al año 2016. Los robos con fuerza en domicilios donde la reducción ha sido del -14,1%. Los robos con violencia e intimidación también se han reducido un -14,8 % respecto al año 2016.

Las sustracciones de vehículos han descendido un -32,3 % y los hurtos han registrado un descenso del -5%. Los asesinatos y homicidios dolosos han descendido -10 %, y los secuestros han descendido pasando de 1 del año 2016 a ninguno el año 2017. Los homicidios consumados han aumentado, de uno cometido en el años 2016 a 5 del año 2017. El tráfico de drogas ha subido en la provincia un 29,5%, mientras delitos contra la seguridad vial que se han reducido un -1,4%.

Por otro lado, uno de los aspectos donde se ha conseguido una importante reducción de los índices delictivos son los delitos cometidos en el campo, las sustracciones en explotaciones agrícolas y ganaderas. Se ha pasado de 3.013 denuncias del año 2016 a los 2.425 del año 2017, lo que significa una reducción de las infracciones penales en el campo del -19,5 %.

En cuanto a las provincias, el descenso en la provincia de Valencia ha sido del -15,9%, pasando de 2.088 infracciones penales a las 1.756, mientras en la provincia de Alicante el descenso ha sido el descenso del -18% pasando de 523 infracciones a 429 en el año 2017 y por último en la provincia de Castellón registra la mayor bajada de robos en el campo con un descenso del -40,3%, de 402 del año 2016 a las 240 del año 2017.

El delegado del Gobierno valoró el balance de criminalidad que sitúa a la «Comunitat con los mejores datos de la serie histórica», y esto no es fruto de la casualidad «sino del trabajo y el esfuerzo que realizan los efectivos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad tanto del Estado como de los municipios».

Para Moragues la seguridad «es clave para la economía, nuestro campo y especialmente para un sector tan importante como es el turismo donde la seguridad es uno de los factores determinante para que muchos turistas elijan España y la Comunitat Valenciana como destino de sus vacaciones».

Pese a este positivo balance, la provincia sigue reivindicados mejoras, sobre todo en dotaciones, como los cuarteles en Onda y Almassora, y más efectivos policiales.