n El pleno del Ayuntamiento de Castellón debatirá en su próxima sesión plenaria, que se celebrará el jueves 29 de marzo, la nueva ordenanza de regulación del ruido para todo el término municipal. La normativa propuesta se estructura en una exposición de motivos; nueve títulos que se articulan a través de 58 artículos; disposiciones adicionales; disposición transitoria; disposición derogatoria; disposición final y anexos.

Los ámbitos de aplicación incluyen edificaciones; actividades industriales, comerciales y de servicio; actividades sujetas a legislación vigente en materia de espectáculos públicos, actividades recreativas y establecimientos públicos; trabajos en vía pública y en la edificación que produzcan ruidos; sistemas de aviso acústico; medios de transporte, circulación de vehículos a motor y ciclomotores y comportamiento ciudadano.

La primera ordenanza de este tipo con que contó el Ayuntamiento de Castelló fue la de Ruidos y Vibraciones se remonta al 25 de marzo de 1986, que fue sustituida por la Ordenanza de Protección Contra la Contaminación Acústica aprobada el 28 de octubre de 2010, que quedará derogada en caso de aprobarse la nueva ordenanza. Diversos cambios normativos han motivado la necesidad de elaborar una nueva normativa municipal. En caso de aprobarse provisionalmente en el próximo pleno, se abrirá un proceso de exposición pública durante el que se podrán presentar alegaciones.

La nueva ordenanza propone determinar los valores límites para ruido y vibraciones conforme a la ley estatal, completar esos valores en caso de que sea necesario con los establecidos en la normativa autonómica, tomando siempre como referencia los niveles de recepción más restrictivos, y ajustarse a las tres franjas horarias que fija la normativa europea.

Así, la franja horaria diurna irá de 7.00 a 19.00 horas; la vespertina, de 19.00 a 23.00 y la nocturna de 23.00 a 7.00 horas.

En cuanto a algunas de las novedades, destaca la diferenciación entre ambientación musical y la amenización musical; la simplificación de los procedimientos administrativos para facilitar las tramitaciones garantizando el cumpliendo de los estándares de calidad acústica; la regulación de eventos y actuaciones al aire libre en función de si se utilizan equipos amplificados o no;.

También se contempla creación de una Comisión de Seguimiento para el Control de la Contaminación Acústica optando por una comisión más simple y funcional.