El viento avivó ayer dos incendios en Moncofa y Jérica.

Alrededor de 4 hectáreas de masa forestal entre pinar, monte bajo y áreas de cultivo abandonado ardieron ayer por la tarde en el término municipal de Jérica, en las partidas de las Perdigueras y la Jarca, próximas a la pedanía de Novaliches.

El fuego comenzó sobre las 15.00 horas en una zona de barranco y las fuertes rachas de viento que durante la tarde azotaron la zona hicieron que rápidamente las llamas se extendieran hacia la zona de pinada. A ello se unió la falta de medios aéreos para trabajar en la extinción que, debido al fuerte viento, no pudieron actuar por lo que, durante cuatro horas, los medios terrestres de los bomberos y las brigadas forestales tuvieron que emplearse a fondo para, a última hora de la tarde, dar por estabilizado el perímetro y el fuego.

Durante la extinción, trabajaron 6 unidades de bomberos forestales de la Generalitat, 5 autobombas, una unidad de vigilancia. Asimismo, durante la noche, varias brigadas forestales trabajaron refrescando la zona para evitar posibles rebrotes que podrían reproducirse por las fuertes rachas de viento.

Los vecinos de la zona mostraban ayer su indignación ante este incendio que, una vez más pone el susto en el cuerpo a los novalicheros. Y es que son múltiples las veces que por los alrededores de la pedanía se registran incendios que, por las características, los puntos de inicio y las horas en las que suceden, todo hace pensar que serían provocados.

El incendio que se originó en Moncofa se dio por extinguido por la tarde y trabajaron en él dos dotaciones del Parque de la Plana Baixa.