El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó ha realizado la primera prueba de vuelo de los drones adscritos a la Policía Local encargada del medio rural y medio ambiente, que se utilizarán «para aumentar la seguridad en el campo, evitar robos y detectar focos de vertidos incontrolados, dos de los problemas más graves que sufre el municipio», tal y como expresaron la alcaldesa, Tania Baños, y el concejal de Agricultura, Fernando Daròs.

Este proyecto es pionero en la provincia de Castelló gracias a un convenio suscrito con la Universitat Politècnica de València (UPV) para impulsar la integración de las aeronaves no tripuladas en la administración pública, en el que también participan Xàtiva y Algemesí con dos experiencias (agricultura de precisión y control de robos en chalets) que «podrán implantarse en nuestra ciudad una vez se evalúe su funcionamiento», señalaron.

Los trámites para que el Ayuntamiento de la Vall d'Uixó se inscriba como operador de vuelo finalizarán en los próximos días, de manera que en breve «pondremos en marcha el servicio de forma autónoma» a través de dos agentes de la Policía Local que han recibido formación teórica y práctica «para obtener la licencia y poder utilizar los drones, porque la normativa es muy estricta».

Esta iniciativa facilitará el control del término municipal, que es muy amplio y «muy difícil de controlar con la patrulla rural». De esta manera «seremos más eficientes y efectivos, gracias a la aplicación de la tecnología para cuidar y proteger nuestro entorno natural y a los agricultores», reiteró la alcaldesa, Tania Baños. Además se podrán detectar y sancionar infracciones, ya que estos dispositivos detectan matrículas y vehículos no autorizados en las zonas asignadas.

Estas aeronaves no tripuladas pueden alcanzar hasta 120 metros de altura, lo que en una ratio de 500 metros permite controlar 80 hectáreas. Asimismo toma vídeos y fotografías de alta calidad y cartografías con una precisión de 2 centímetros. Esto resulta «especialmente útil para identificar y geoposicionar vertidos en un punto exacto del mapa, recoger los datos y detectar variaciones en el tiempo si ha aumentado el volumen y la cantidad».

En los próximos meses se podrán ampliar los usos de los drones, desde la agricultura de precisión (medición de niveles de estrés hídrico, nutrientes, etc) hasta seguimiento de la evolución de focos de incendios o ayuda en el rescate de personas en la montaña.