Cuenta la leyenda que a principios de los años 80 se levantó en Castelló, envuelta por las calles República Argentina, Lepanto y Jorge Juan, la plaza Juan Bautista Porcar. Sí, esa que todos los castellonenses conocen como la de las Pinturas, con esos edificios donde aparece el arte rupestre descubierto en 1933 en el barranco de La Gasulla, en el municipio de Ares del Maestre, por el propio Juan Bautista Porcar.

Pero no se engañen, es la leyenda de la plaza con nombre, entre otras cuestiones porque, oficialmente, para el área de Cultura -la responsable del callejero de la ciudad- estamos ante un espacio urbano anónimo, sin registro oficial y, lo que es ya el culmen de la historia, sin opciones de poder llamarse Juan Bautista Porcar porque en el Grau ya existe un espacio dedicado al reconocido artista castellonense: Pintor Porcar.

Como suele pasar, el descubrimiento fue producto de la casualidad. Así lo explica Luis López, representante de la Asociación de Vecinos de Maestría, quien se acercó hace unos meses hasta el ayuntamiento para solicitar algo tan sencillo como la colocación de placas con el supuesto nombre porque no había ninguna. «Habíamos visto que en Google Maps y en el propio callejero del ayuntamiento no aparecía el nombre y pensamos que sería adecuado pedir la colocación de placas para informar a los viandantes», explica el presidente del colectivo vecinal.

La sorpresa vino cuando, al pedir datos de la plaza en el área de cultura del consistorio, «nos informaron de que no aparecía en los registros». Nadie se había dado cuenta en estos 30 años, sobre todo porque las viviendas o comercios del entorno están inscritas en las calles que visten la plaza. Hasta el propio ayuntamiento, por ejemplo, organiza actividades como el ´Mercat de la Taronja´ en la supuesta Juan Bautista Porcar.

Pero las sorpresas no acabaron ahí. Cuando los vecinos hicieron las gestiones para subsanar este vacío, «nos explicaron desde Cultura que encima tampoco podíamos denominarla Juan Bautista Porcar porque en el Grao ya hay una que se llama Pintor Porcar, por lo que no podía ser igual». El objetivo ahora es buscarle nombre, algo que ya han trasladado en las reuniones del distrito. Por eso, han planteado a los vecinos, a través de su página web, que den su opinión. Así, ya hay algunos que se han pronunciado, coincidiendo muchos en que se llame la plaza de Las Pinturas.

Historia

Haciendo un recorrido por la historia vemos que parte de los terrenos de la plaza estaban ocupados por la vivienda del pintor Juan Bautista Porcar (1889-1974), en la esquina de la calle Lepanto, una vivienda que también fue una fábrica de calcetines. También se sabe que en la vivienda se estableció el centro de reunión internacional para estudiar las pinturas rupestres.

Porcar murió en 1974 y el ayuntamiento, en 1976, aprobó el proyecto de apertura de la calle República Argentina, aunque no quedó ratificado hasta 1979 con el pago de 1.403.461 pesetas por la expropiación del ´maset´ de Porcar. Finalmente, a principios de los años 80, se derribó la casa y se construyó la plaza, que más de 30 años después sigue sin nombre.