La regresión de la costa es una de las principales amenazas en los municipios del litoral sur de la provincia de Castelló. El Gobierno prevé comenzar en 2019 las obras para consolidar la franja marítima de las localidades de Almenara y la Llosa.

Este año culminará los trámites de este proyecto de mejora, que contempla una serie de espigones que eviten los daños que suelen sufrir playas y paseos marítimos en cada episodio de temporal. El presupuesto recoge 700.000 euros en diversas actuaciones relacionadas con la costa castellonense. Establece 500.000 euros para el control de la regresión de la costa de Castelló. En este caso el proyecto global asciende a los 2,9 millones. Para 2019 hay proyectados 700.00, en 2020 otros 700.000 y para 2021 un millón de euros. La dotación presupuestaria integra también 100.000 para la protección y recuperación de sistemas litorales de Castelló, y 100.000 para la accesibilidad en el citado litoral.

El Ejecutivo central prevé llevar a cabo seis espigones en el término municipal de Almenara. Asimismo, reforzará con grava en el entorno de la gola de Queralt con una periodicidad media de tres años, y ejecutará otros dos espigones en el encauzamiento de la gola de Queralt de 80 metros de longitud en su tramo recto y 50 metros en quiebro hacia el sur.

Por otro lado, a la vista del presupuesto todo hace indicar que el ministerio apurará los plazos para activar las desaladoras de Orpesa y Moncofa, que costaron 100 millones de euros. Tiene de tiempo hasta el 31 de marzo de 2019 para que operen si no quiere perder 35 millones aportados por la Unión Europea. Las dos plantas están paralizadas por falta de demandantes.

Así, el presupuesto para una actuación de desarrollo de infraestructuras de distribución de agua de la desaladora de Moncofa al sur de Castelló y Vila-real, valorado en ocho millones, se aplaza a 2021.