La festividad de Sant Vicent Ferrer en la provincia de Castelló tuvo ayer un cariz muy especial con motivo del inicio del Año Jubilar Vicentino con motivo del 600 aniversario de la muerte del universal dominico. El obispo de la diócesis Segorbe-Castelló, Casimiro López deseó ayer que sea un tiempo «para crecer en santidad, en deseo de evangelizar y en eclesialidad». Además de la misa que tuvo lugar en Segorbe a cargo del obispo, varios municipios de la provincia celebraron la festividad de Sant Vicent.

Misa y procesión

La jornada en la Vall d'Uixó, que comenzó con una despertà, tuvo como protagonistas la misa en la ermita de Sant Vicent Ferrer por la mañana y la procesión con la imagen del santo que se celebró por la tarde y en la que participaron la reina de las fiestas y su corte de honor, así como autoridades municipales, Comisión de Fiestas y l'Associació Vicentina de La Vall d'Uixó. El día festivo también contó con una mascletà y con la clausura de la Fira de Sant Vicent. El broche final lo puso el disparo de un castillo de fuegos.

Fiesta de Interés Turístico Local

La población de Nules vivió ayer uno de los días festivos más destacados en el que participaron centenares de personas de diferentes edades con motivo del pasacalle protagonizado por las quintas; una fiesta que además fue declarada en su día como Fiesta de Interés Turístico Local. La fiesta estuvo organizada este año por la Quinta del 93 y en ella los carros engalanados con caballos acompañados de música recorrieron diferentes calles del casco urbano hasta llegar a la calle Sant Vicent donde rindieron tributo al santo rodeando la tradicional hoguera.Por la tarde hubo misa y procesión así como la entrega del guión a la Quinta del año 1994 delante del dosel que hay en la Plaza Mayor. Esta quinta será la encargada de organizar la fiesta del próximo año.

Fin a una semana festiva

La Llosa vivió ayer su última jornada de celebraciones en honor a Sant Vicent. La jornada comenzó a las 08.00 horas con el volteo de las campanas y a las 11.30 horas dio comienzo el pasacalle para recoger a los Clavarios y la imagen del santo y regresar a la iglesia donde se realizó una solemne misa. Al finalizar la música se disparó una mascletà en la plaza de España a cargo de la pirotecnia Peñarroja. Por la noche estaba prevista la procesión con la imagen del santo por la calles del municipio y el disparo de un castillo de fuegos artificiales.

Tradicional «mocadorà»

Los vecinos de l'Alcora celebraron la festividad de Sant Vicent con una romería desde la iglesia hasta la ermita de Sant Vicent donde se celebró una misa. Asimismo, en los alrededores de la ermita tuvo lugar la tradicional mocadorà y el concierto a cargo de l'Agrupació Musical l'Alcalatén. A las 13.00 horas dio comienzo la bajada de la romería desde el ermitorio de Sant Vicent hasta la llegada de nuevo a la iglesia parroquial.

Reparto de «fogasetes»

Los vecinos de Sant Joan de Moró cumplieron con el rito de subir a la ermita en honor a Sant Vicent para honrar al santo. Todos los participantes recibieron, de mano de los kintos, el típico bocadillo de pan, conocido popularmente como fogaseta y que fueron elaborados por los hornos de la localidad, para acompañar al multitudinario almuerzo que se celebró en la explanada que hay frente a la ermita. En total, a lo largo de toda la mañana se repartieron cerca de un millar de panecillos. Después de reponer fuerzas se celebró una misa cantada y fue sacada en procesión la imagen del santo que, como manda la tradición, fue portada por un grupo de vecinos llamados, todos ellos, Vicente.