Tras el susto del pasado verano, cuando un rayo cayó sobre el campanario de Xiva, ya se están ultimando los trámites para arreglar los daños producidos. Según señaló el párroco de la localidad, las reparaciones comenzarán en breve aunque todavía no cuentan con una fecha fija, ya que faltan algunos permisos para poder ejecutar las obras.

Los gastos de reparar los daños causados por el rayo serán sufragados por la parroquia y su seguro. Con todo casi a punto para que el campanario vuelva a estar en perfecto estado solo falta que se fije una fecha para el comienzo de las obras y que no haya problemas durante la actuación o en el desplazamiento de las máquinas y materiales a utilizar. Y es que Xiva es un municipio con calles estrechas, lo que puede dificultar el paso de camiones y otros vehículos de gran anchura necesarios para llevar a cabo la actuación.